El 17 de marzo de 2020, dos semanas después de que el Minsal confirmara el primer caso de Covid en Chile, Rapa Nui cerró su frontera al turismo.
Desde entonces, la isla dejó atrás a los 150 mil visitantes que recibía anualmente y, también, a su principal fuente de ingresos: el turismo.
A dos años del mayor aislamiento que ha vivido Rapa Nui, el alcalde Pedro Edmunds (PRO) reflexiona y comenta que “si bien desde el punto de vista del cuidado de la salud ha sido muy positivo, con nuestra isla resguardada del Covid, desde el punto de vista financiero ha sido muy difícil, con economía cero”.
“Estamos en una situación muy preocupante. El primer año vivimos de los ahorros. El segundo, del programa municipal Pro Empleo -que da trabajo a más de 800 personas- y de algunos aportes del gobierno, como el crédito Fogape, el IFE y los retiros. Pero ya este tercer año es insostenible”, agrega Uko Tongariki Tuki, director de Turismo del municipio.
Según el funcionario, entre el 90% y el 95% de los habitantes de la isla vivía del turismo, directa o indirectamente, antes de la pandemia. Sin visitantes, explica, al menos 100 locales comerciales, como restaurantes, bazares o negocios de artesanía, tuvieron que cerrar.
Algunos hoteles han resistido, habilitando sus comedores y piscinas. Y también algunos emprendedores gastronómicos, que ampliaron su oferta culinaria pensando ahora en los residentes e innovando con el sistema de reparto a domicilio.
Tongariki, además, señala que desde fines de 2021 el municipio ha registrado un aumento en la solicitud de patentes comerciales para la venta de ropa, que llegan en el único embarque marítimo y cuatro aéreos destinados mensualmente a los residentes. “Como la gente no puede viajar y comprar, empezaron a abrir estos locales. Se ve más demanda de ropa, de poleras, pantalones, zapatillas. En la feria local se ve más ese tipo de pequeños negocios”.
Así y todo, Uko Tongariki Tuki dice que apremia la apertura de la isla, pues “es una urgencia para las personas que tienen deudas y después de dos años se acabó el ingreso. Es una situación preocupante”.
En 2021, con la aprobación de la comunidad, el municipio y el gobierno habían acordado la reapertura al turismo para el 3 de febrero pasado. Pero el alza de los contagios en el continente y el lento avance de la campaña de vacunación en Rapa Nui forzaron a retrasar la medida.
Sin fecha de reapertura
El seremi (S) de Salud de Valparaíso, Emilio del Solar, dijo que “aún no se ha proyectado una fecha de reapertura de Isla de Pascua, ya que, principalmente, depende de que mejoren las condiciones epidemiológicas del continente y que avance el proceso de vacunación contra el Covid-19, tanto entre la comunidad rapanui como en el país”.
Las condiciones para abrir, dice el alcalde, se mantienen: “Que la vacunación en la isla supere el 80% y que el nivel de infectación en el continente esté a la baja, situación que todos sabemos no se ha logrado. Por ello, no hay fecha definida para la reapertura”. Mientras tanto, Edmunds dice que está haciendo gestiones para extender el programa Pro Empleo.
Actualmente, el 82% de los residentes -mayores de 12 años (6.960 personas)- cuentan con ambas dosis. El 86,7% solo con la primera. Y el 64,7% de los isleños -mayores de 18 años- tienen la dosis de refuerzo, quedando 947 rezagados.
Asimismo, Isla de Pascua ya cuenta con un laboratorio para el procesamiento de exámenes de pesquisa de Covid-19. La Seremi está evaluando, además, habilitar una residencia sanitaria “si así se requiere”.
En lo que va de pandemia, 30 personas se han enfermado de Covid-19 en la isla. Este jueves, la Seremi informó ocho casos nuevos, residentes que volaron desde el continente a la isla el 23 de febrero, y que durante su aislamiento dieron positivo a coronavirus. Como medida preventiva, la autoridad testeará, entre el 4 y 8 de marzo, al resto de los viajeros (155) y a sus contactos estrechos (25), quienes saldrán de cuarentena una vez que cuenten con resultado negativo de PCR o test de antígenos.
Mai Teao, delegado presidencial provincial de Isla de Pascua, confirma que “todavía no manejamos una fecha (de apertura). Sí estamos avanzando con las vacunas. La fecha de apertura la está viendo el alcalde con su equipo, y nosotros como gobierno nos estamos preocupando del hospital, de tenerlo en condiciones”.
Lo anterior, precisó Teao, pues “el hospital no está implementado para un brote. La política es que un caso grave se sube a un avión y se va al continente, pues el hospital está categorizado como de baja complejidad. Hay muchos factores técnicos que necesitamos para que el hospital tenga una sala UCI y el cambio de complejidad es clave. Es en lo que he estado trabajando. Esperamos que se pueda concretar”, señaló el delegado.
Teao, además, dijo que le pidió a la directora del Servicio de Salud Metropolitano Oriente, del cual depende el hospital Hanga Roa (inaugurado en 2012), que “por favor se instale una sala de aislamiento o sala UCI, donde podamos tener a nuestros pacientes, y un equipo con profesionales. Ella dijo que lo estaba trabajando”.