Este martes las autoridades del Ministerio de Salud (Minsal) anunciaron nuevas adecuaciones al plan Paso a Paso para enfrentar la pandemia, siendo uno de los mayores cambios el uso no obligatorio de la mascarilla a partir del 14 de abril en casos específicos -de acuerdo a nuevas “fases de impacto sanitario”-, donde el riesgo de contagio sea muy bajo.
José Miguel Bernucci, internista y secretario nacional del Colegio Médico, quien además integra una de las siete mesas técnicas del Comité de Respuesta Pandémica, tiene reparos con el nuevo plan. Y sostiene que falta comunicación entre los integrantes de la nueva gobernanza: “La entrega de información es unidireccional, porque las mesas de trabajo entregan la información al comité, pero no hay un feedback”.
Frente a los dirigentes del gremio que asumieron cargos en el gobierno, el especialista en medicina interna defiende la participación del gremio en política y recalca que desde los inicios del Colegio Médico que su historia está ligada con el activismo y el manejo sanitario del país. “Creo que demostramos con creces nuestra neutralidad”, dice.
¿Cómo ha visto el aterrizaje del nuevo equipo del Ministerio de Salud?
Ha sido difícil. No por las personas que aterrizaron, sino porque llegó un equipo completamente nuevo, y muchos de ellos no tienen experiencia previa en la administración del Estado. Además, hay equipos que se van a tener que renovar por completo. Yo creo que ha sido más lento de lo que muchos nos imaginábamos. Han tenido que generar procesos internos que probablemente no estaban calculados en un inicio.
¿Es correcto tener tantas mesas de trabajo, si finalmente llevan dos años haciendo propuestas?
Es lo adecuado. Es lo que siempre se debió haber hecho y afortunadamente ahora se está haciendo. Hay que comprender que las mesas de trabajo entregan los insumos para que el Comité de Respuesta Pandémica (CNRP) tome las decisiones. En ese sentido, las mesas de trabajo permiten que los expertos puedan discutir abiertamente y así el comité puede tener visiones más complementarias.
¿El comité ha tomado en cuenta el trabajo de las mesas técnicas?
Yo creo que sí. También creo que dentro de esta lentitud en la instalación hay procesos que se podrían mejorar mucho más dentro de la gobernanza.
¿Como cuáles?
La entrega de información es unidireccional, porque las mesas de trabajo entregan la información al comité, pero no hay un feedback desde ellos hacia las mesas. No hay pimponeo de la información entregada. Nosotros creemos que el feedback es necesario para aumentar la calidad de los productos que saldrán de la gobernanza.
Este martes las autoridades sanitarias anunciaron el uso no obligatorio de la mascarilla en casos específicos. Usted también estaba de acuerdo con flexibilizar su uso en espacios abiertos, sin embargo, aún tiene reparos. ¿Cuáles?
En realidad, como Colegio Médico estamos de acuerdo con la adecuación del uso de las mascarillas. Producto del desarrollo de la pandemia, más el programa de vacunación y de toda la evidencia que ya conocemos, nos permite saber que el principal mecanismo de contagio se produce a través de los aerosoles. En espacios abiertos con distanciamiento social y en un contexto donde la circulación viral es baja, la posibilidad de contagio a través de estos aerosoles es prácticamente cero. En ese sentido, es una buena noticia que en las actividades al aire libre con distanciamiento social no sea obligatorio utilizar la mascarilla.
¿Cuáles son los reparos?
Por un lado, hay que tener mucho cuidado con que esto no se transforme en una flexibilización o se entienda como un paso que nos acerca al fin de la pandemia, porque lamentablemente eso no es así. En segundo lugar, pensamos que esta modificación del uso de la mascarilla tenía que darse en un contexto de cambio profundo en el plan Paso a Paso, principalmente porque el actual no tiene ningún sentido. Nadie sabe en qué fase está, cuáles son los cambios que hay entre etapas. Nosotros habíamos planteado en la mesa una adecuación del plan Paso a Paso y los reparos están dados porque esos cambios se dieron de forma parcial.
¿Cuáles cree que son las debilidades de este nuevo Paso a Paso?
Tiene un espíritu de simplificación. Se discutió en la mesa técnica que el nuevo plan Paso a Paso tenía que cumplir con ciertos objetivos, como por ejemplo que fuera un plan muy simple, asimilable por la población, y que permitiera a las personas saber qué significa estar en cada fase. Esos objetivos se cumplieron de forma parcial, porque aunque el plan tiene tres fases, se le agregan dos estadios más, entonces igual tiene cinco etapas. Además, aún no hay claridad de cuáles serán los objetivos que se tienen que cumplir para estar en cada fase.
Este gobierno dijo que serían más transparentes con las decisiones, ¿lo han sido?
Sí. Las minutas y las actas de las reuniones son públicas, están en la web. Ese era uno de los objetivos, el cual es primordial y se está cumpliendo. El problema no va por la transparencia, sino que va por aceitar el funcionamiento de esta nueva gobernanza. Nosotros esperamos que los problemas de comunicación interna que se han presentado de forma esporádica se puedan mejorar y eso pueda llevar a tener mejores decisiones en salud.
A la actual administración se le critica la falta de comunicación de riesgo, misma crítica que el Colmed le hacía al gobierno anterior. ¿Cuál es la diferencia ahora?
Nosotros aplaudimos como cambió la gobernanza, pero echamos de menos el sentido de urgencia y así se lo hicimos saber a las nuevas autoridades. Más que comunicación de riesgo hay que comunicar las acciones que se están tomando.
“Hay que sacar la caricatura de que encontrábamos todo malo”
Parte importante de la directiva del Colmed de la cual usted era parte tomó cargos de primera importancia en el gobierno, partiendo por Izkia Siches, su gabinete, y varios seremis de Salud. ¿Cuánta neutralidad puede tener el Colmed respecto de las políticas de esta administración?
Vamos a tener la misma que hemos tenido siempre. El exministro de Salud Enrique Paris fue presidente del Colegio Médico y creo que demostramos con creces nuestra neutralidad. Esta es una institución que tiene más de 75 años y hemos tenido dirigentes nacionales que han sido autoridades. Esta relación entre el Colmed y ser autoridad es un factor que viene desde su nacimiento.
¿Se desfigura el rol del Colmed ahora que varios de sus representantes están en el gobierno?
No, para nada. Esto de que los dirigentes pasen a ser autoridades es algo que viene con el nacimiento del Colmed, entonces pretendemos seguir con ese rol histórico. Si tenemos que señalar algo que vaya en contra de las políticas del gobierno, como institución no tenemos ningún reparo en hacerlo.
¿Cree que se le hizo daño al Colmed como entidad gremial el hecho de que estos representantes terminaran en el actual gobierno? ¿Se arriesgó dejar al Colmed más como una entidad más política que gremial?
El nacimiento del Colegio Médico se hizo al alero del nacimiento del Servio Nacional de Salud. El primer presidente del colegio, Sótero del Río, fue ministro de Interior y de Salud en gobiernos radicales. También tenemos la historia del expresidente Salvador Allende, quien fue presidente del gremio. Tenemos diversos dirigentes nacionales que han sido parlamentarios. Probablemente, esto se ve más extraño para la gente que no forma parte de la historia del colegio y que lo ve desde afuera, pero la historia del colegio está ligada a la historia sanitaria y política del país.
¿Qué le pareció el premio que el lunes recibieron Paula Daza, Andrés Couve y Leonardo Basso?
Primero, hay que sacar un poco la caricatura que se nos ha hecho de que encontrábamos todo malo, porque eso no es así. Nosotros hemos felicitado e incluso hemos conversado directamente con las autoridades de la época por los puntos altos y positivos que se hicieron durante la pandemia. Fueron las autoridades de la administración anterior quienes antes que muchos países desarrollados se consiguieron vacunas. Este premio es un reconocimiento a la labor que se hizo. Sin embargo, esto ejemplifica uno de los grandes problemas que tuvo el manejo anterior. Lo que se está reconociendo es un sistema de datos que cruzaba información referente a contagios y contactos para dirigir la búsqueda activa. A nosotros nos parece un sistema importante, pero jamás supimos de este sistema y eso es lamentable, porque no sabemos cuántos contagios evitó o cuántas hospitalizaciones o fallecimientos se evitaron.