La esperanza de vida en EE.UU. cayó 1,5 años en 2020, el mayor descenso desde al menos la Segunda Guerra Mundial, ya que la pandemia Covid-19 mató a cientos de miles y exacerbó las crisis de sobredosis de drogas, homicidios y algunas enfermedades crónicas.

Los datos provisionales publicados el miércoles por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) mostraron que la esperanza de vida de los estadounidenses se redujo a 77,3 años en 2020, aproximadamente el mismo nivel que en 2003, borrando años de avances logrados con tanto esfuerzo en la salud pública del país. Fue la caída más grande registrada en un año desde 1943. No está del todo claro qué causó la caída ese año, cuando Estados Unidos estaba luchando en la Segunda Guerra Mundial.

“Yo misma nunca había visto un cambio tan grande, excepto en los libros de historia”, dijo Elizabeth Arias, demógrafa del Centro Nacional de Estadísticas de Salud de los CDC y autora principal del informe.

La esperanza de vida no se recuperará a niveles prepandémicos en 2021, dijeron la Dra. Arias y otros expertos en salud de la población, y podría disminuir nuevamente si surge una nueva variante de Covid-19 contra la que las vacunas no protegen, dijeron algunos. La variante delta, altamente transmisible del virus, ha aumentado nuevamente los casos, las hospitalizaciones y las muertes, particularmente en partes del país donde las tasas de vacunación son bajas.

El número total de víctimas de la pandemia aún no se ha visto, dijeron médicos y funcionarios de salud pública. Muchas personas omitieron o retrasaron el año pasado el tratamiento por afecciones como diabetes o presión arterial alta y soportaron aislamiento, estrés e interrupciones en la dieta normal y las rutinas de ejercicio.

“Eso ha provocado efectos a medio y largo plazo con los que tendremos que lidiar en los próximos años”, dijo Donald Lloyd-Jones, presidente del departamento de medicina preventiva de la Escuela de Medicina Feinberg de la Universidad Northwestern y presidente de la Asociación Estadounidense del Corazón.

La esperanza de vida es una medida del bienestar y la prosperidad de una nación, basada en la mortalidad en un año determinado. La disminución o el estancamiento de la longevidad pueden indicar eventos catastróficos o problemas profundos en una sociedad, dicen los investigadores. La esperanza de vida se redujo en EE.UU. en 11,8 años en 1918, durante una pandemia mundial de gripe. Muchas víctimas eran jóvenes.

La pandemia de Covid-19 fue responsable de la mayor parte del declive del año pasado. El Covid-19 fue la causa subyacente o contribuyente de 385.201 muertes, según los CDC, lo que convirtió a la enfermedad en la tercera causa principal de muerte del país en 2020. Muchas de esas muertes podrían haberse evitado con una respuesta más fuerte a la pandemia, han dicho investigadores médicos y de salud pública. Las dos principales causas de muerte del país son las enfermedades cardíacas y el cáncer.

Más muertes por homicidio, diabetes y enfermedad hepática crónica -que está relacionada con el consumo excesivo de alcohol- también contribuyeron a la caída de la esperanza de vida el año pasado, dijeron los CDC. Los confinamientos pandémicos, la recesión y una reacción violenta contra las tácticas policiales contribuyeron a un fuerte aumento de los homicidios en las grandes ciudades de EE.UU. que ha continuado en 2021, según la policía, los investigadores, los alcaldes y los líderes comunitarios.

La esperanza de vida habría caído aún más, dijeron los CDC, si no fuera por la disminución de la mortalidad por cáncer, enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores como bronquitis, enfisema y asma, y otros factores.

Los descensos fueron mayores para los latinos y los negros, que como grupos de población se vieron afectados de manera desproporcionada por la pandemia. La mayor caída para cualquier cohorte fue de 3,7 años para los hombres latinos, llevando su esperanza de vida a 75,3 años.

La longevidad en Estados Unidos se había estancado en gran medida desde 2010, incluso disminuyendo en tres de esos años, debido en parte a un aumento en las muertes por sobredosis de drogas, el aumento de las tasas de mortalidad por enfermedades cardíacas en los estadounidenses de mediana edad y otras crisis de salud pública.

“Volver a donde estábamos antes de la pandemia es un lugar muy malo”, dijo Steven Woolf, director emérito del Centro de Sociedad y Salud de la Escuela de Medicina de la Virginia Commonwealth University y autor de un estudio reciente que compara los efectos de la pandemia sobre la esperanza de vida en EE.UU. y otros países de ingresos altos. “Tenemos un problema mayor aquí”.

La pandemia afectó más la esperanza de vida en EE.UU. que en otras naciones avanzadas, dijo el Dr. Woolf. Entre 2018 y 2020, la esperanza de vida disminuyó un promedio de 0,22 años en los países pares, estimó, ampliando la brecha de longevidad con esas naciones que estaba creciendo antes de la pandemia.

Las muertes por sobredosis de drogas aumentaron casi un 30% el año pasado, impulsadas por la proliferación del opioide sintético mortal fentanilo, así como por el estrés, el aislamiento y la reducción del acceso al tratamiento durante la pandemia, dijeron expertos en salud pública. Un estudio publicado este mes encontró una disminución del 28,3% en el inicio del tratamiento de adicciones en California desde marzo hasta octubre de 2020.

La pandemia también tuvo un efecto sobre los nacimientos, ya que el año pasado el número cayó al nivel más bajo en más de cuatro décadas, continuando una caída de la fertilidad y probablemente mostrando que la propagación de un virus mortal disuadió a algunas mujeres del embarazo.

Los datos de los CDC también muestran disparidades más amplias entre hombres y mujeres, así como entre grupos raciales y étnicos. La esperanza de vida de las mujeres fue 5,7 años mayor que la de los hombres en 2020, probablemente porque más hombres han muerto de Covid-19, dijo la Dra. Arias.

Las poblaciones latinas y negras fueron las más afectadas debido a la exposición al virus en el trabajo, la falta de acceso a una buena atención médica, las condiciones de vida a veces hacinadas y otros factores, dijeron funcionarios de salud pública y académicos.

Los latinos en EE.UU. han demostrado tradicionalmente una ventaja en la longevidad. Esa brecha se redujo el año pasado cuando la esperanza de vida de esa parte de la población se redujo en tres años. El Covid-19 fue responsable del 90% de la disminución, según los CDC.

Una de las razones del gran número de víctimas entre los latinos es que muchos de los que murieron eran más jóvenes que los de otros grupos, dijo Theresa Andrasfay, becaria posdoctoral de la Escuela de Gerontología Leonard Davis de la Universidad del Sur de California, quien recientemente publicó una carta de investigación sobre los efectos de la pandemia en la longevidad por raza y etnia.

Una brecha de mortalidad que se había ido reduciendo entre las poblaciones blancas y negras se amplió, ya que la esperanza de vida de las personas negras cayó 2,9 años a 71,8, la más baja desde 2000, según los CDC. El Covid-19 fue responsable del 59% de la caída, dijeron los CDC. Las sobredosis de drogas, los homicidios y las enfermedades cardíacas se encuentran entre otros factores contribuyentes.

La esperanza de vida de las personas blancas se redujo 1,2 años, a 77,6 años en 2020, el nivel más bajo desde 2002. El Covid-19 fue responsable del 68% de la disminución, dijeron los CDC. Las sobredosis de drogas y la enfermedad hepática crónica también fueron factores contribuyentes.

La enfermedad cardíaca sigue siendo la principal causa de muerte en el país y la pandemia también impidió que muchas personas con síntomas potencialmente mortales acudieran a los hospitales porque temían contraer Covid-19, dijo el Dr. Lloyd-Jones.