Con el fuerte aumento del precio del cobre por sobre US$4 la libra, en las últimas semanas algunos actores han planteado la idea de aumentar los impuestos al metal rojo para incrementar los ingresos del Fisco. En esta línea, el exministro de Hacienda y candidato presidencial de Evópoli, Ignacio Briones, realizó una propuesta para aumentar la recaudación en minería, pero que apunta hacia las concesiones y patentes mineras.
Plantea que en 2020 el cobre representó apenas el 5,9% de los ingresos del Fisco, cifra inferior al 20% que representaba en 2010 y al 34% de 2006, período en que se experimentó un “súper ciclo” del cobre, con su valor superando ampliamente los US$ 3 por libra.
Respecto a la estructura impositiva de la minería, esta se divide en dos partes. Por un lado, el régimen general de impuestos a las empresas en Chile, por el que las empresas mineras tributan el 27% de sus rentas y, por otro lado, el Impuesto Específico a la Actividad Minera (IEAM) o “royalty”, cuya tasa efectiva varía entre el 5% y 14%, gravando progresivamente la renta operacional de las mineras dependiendo de sus ventas anuales.
En particular sobre el “royalty”, en la propuesta se explica que su aporte es muy variable en el tiempo. Según información del Servicio de Impuestos Internos (SII), los mayores ingresos tributarios en base a este impuesto fueron en 2011 y 2012, años de “súper ciclo” en los que el aporte fue de US$ 578 millones y US$ 626 millones, respectivamente. Sin embargo, el 2016 y 2017 fueron sus peores años, con cifras inferiores a los US$100 millones. En tanto, en 2019 con el repunte del precio del cobre los ingresos por dicho impuesto llegaron a US$323 millones.
En ese sentido, Briones señaló que “si aumentamos el pago de patentes mineras, convergiendo a países como Australia o Canadá, abriríamos la cancha a nuevos actores y desarrollaríamos más la minería. Ello también permitiría recaudar más del doble de lo que ha aportado anualmente el royalty. Las bajas patentes actuales bloquean la entrada y con ello el desarrollo, al tiempo que fomentan la especulación”.
El coordinador programático de la candidatura de Ignacio Briones y director ejecutivo de Horizontal, Sebastián Izquierdo, complementó que “una estimación de la recaudación depende de diversos factores, por lo que no es un cálculo sencillo. Entre estos se tiene la proporción de concesionarios que trabajan efectivamente las patentes respecto a aquellos que no, así como también el porcentaje de concesionarios que optarían por deshacerse de sus patentes frente a un aumento del precio. En una estimación inicial, creemos que en el mediano plazo la recaudación superaría a aquella del royalty, ubicándose alrededor de los US$500 millones”.
Concesiones y patentes mineras
En el documento, el exministro de Hacienda precisó que tal como lo advirtió la Comisión Nacional de Productividad (CNP) en 2019 en su estudio “Productividad de la Gran Minería del Cobre”, comparada con las prácticas internacionales, la legislación chilena tiene un margen importante de mejora en materia de concesiones y patentes mineras.
En ese sentido, la minuta detalla que en contraste con otras jurisdicciones mineras relevantes como Australia, Canadá, EE.UU. y Perú, el costo de las patentes en Chile es demasiado bajo. Según la CNP, el valor de la patente anual es de US$1,4 por hectárea para concesiones de exploración, de US$7 por hectárea para concesiones de explotación, y US$2,4 por hectárea para concesiones de explotación no-metálicas (valores calculados a diciembre 2020).
“Esto no solo significa una menor recaudación, sino que también genera incentivos perversos para no explotar los recursos disponibles. Al haber bajos costos para mantener una concesión, se acaba bloqueando la actividad de otros competidores, frenando la productividad minera. Un bajo costo de patente y una duración indefinida limita la disponibilidad de territorio para exploración y explotación en las principales franjas metalogénicas de país”, expresó el candidato presidencial de Evópoli.
Al comparar el costo de amparo total por concesiones de 100 hectáreas de exploración en las principales potencias mineras, Chile se ubica penúltimo con un costo de US$148, solo superando a la zona occidental de Australia, en la que se cobra US$63, y siendo la zona de Queenland también en Australia, la que se ubica inmediatamente sobre Chile con un costo de US$837.
En tanto, países como Perú y EE.UU., en sus tierras federales, cobran US$6.552 y US$5.951 respectivamente.
“Los precios de las concesiones de exploración y concesión debiesen aumentar considerablemente si se busca llegar a un nivel similar de aquel cobrado por otras potencias mineras; en particular, el costo de la patente de exploración resulta particularmente alejado de la media internacional”, afirmó Briones.
En esta línea, el economista plantea que el aumento del cobro debería ser gradual en su aplicación y que una meta razonable en el corto plazo es aumentar los precios por un factor de cinco. Para luego apuntar progresivamente a que las concesiones de exploración y explotación, que lleven más de 2 y 5 años respectivamente, paguen el piso recomendado por la CNP de 12,5 veces el valor actual.
Sin embargo, Briones precisó que se considera que se debería mantener el trato preferencial a la pequeña minería, con un cobro de explotación de 0.001 UTM por hectárea, así como también sus requisitos de aplicabilidad.
Por su parte, Izquierdo añadió que “el aumento de precios mencionado busca llevar el costo de las concesiones de exploración y explotación a un nivel similar del que tienen otras potencias mineras, como Australia o Canadá, cuyo promedio de acuerdo a la CNP es 14 y 6 veces mayor que en Chile, respectivamente. Al respecto, si bien un aumento por un factor de 12,5 del precio de las patentes puede parecer considerable, este es en realidad el piso propuesto por la CNP y considera también una rebaja en los primeros años de concesión, así como también una rebaja condicional por la acreditación de trabajos de exploración e inversión”.
En la propuesta también se afirma que para incentivar el uso efectivo de las concesiones mineras, la patente deberá ser condicional a este. Así, se permitirá una rebaja del pago de la patente mediante un contraprestación.
De esta forma, el exministro de Hacienda sugirió permitir una rebaja del pago de la patente de exploración en hasta un 90% de su valor, mediante la demostración de trabajos de exploración en la propiedad y la entrega de información geocientífica. Mientras que en el caso de la patente de explotación, señaló que se debería permitir una rebaja del pago en los primeros cinco años de vigencia de la patente de hasta un 80% de su valor, mediante la demostración de inversión y entrega de información requerida, variando los requisitos desde el sexto año en adelante.
Duración de la concesiones mineras
Otro punto que se toca en el documento, es la duración de las concesiones mineras.
En ese sentido, el candidato de Evópoli explicó que “si bien la ley indica que en el caso de exploración es de dos años prorrogables por dos más, e indefinida en las patentes de explotación, muchas veces las primeras acaban superando el tope de cuatro años y perjudicando al resto de los agentes mineros interesados en explorar”.
Para regular esta situación, Briones propone transparentar la verdadera duración de la exploración, incentivando la entrega de información geológica y la explotación efectiva, y la extensión del plazo siguiendo los estándares de países como Canadá.
De esta forma, para las concesiones de exploración el periodo inicial sería de tres años renovables hasta dos veces por periodos de tres años, totalizando un máximo de nueve años, pero en cada renovación, el concesionario deberá liberar al menos el 50% de la superficie del derecho minero, permitiendo explorar a otros agentes.
Respecto a la concesión de explotación, Briones argumentó que esta deberá ser esencialmente temporal con un límite máximo de 30 años, con prioridad de renovación si se dan determinadas condiciones objetivas de factibilidad de operaciones mineras en el área, definidas por la ley.