Los consumidores chilenos están más estresados y sienten más incertidumbre. Así lo revela el informe “Sentimiento, Hábitos y Expectativas de los Consumidores” elaborado por la Cámara de Comercio de Santiago (CCS), correspondiente al segundo trimestre de 2022.
El estudio, basado en un set de encuestas mensuales, registró un aumento del estrés (51%) y la incertidumbre (48%) entre los consultados durante el último trimestre. Los porcentajes de quiénes se declaran felices (51%) y esperanzados (61%), en cambio, mostraron retrocesos.
Si se compara con el trimestre anterior, la cantidad de personas que declaró sentir esperanza bajó del 67% al 61% entre abril y junio. Así también con la felicidad, índice que descendió de 55% a 51%. Como contraparte, el porcentaje de consumidores que manifestó sentir estrés subió de 49% a 51%, y la incertidumbre tuvo un salto de 43% a 48%.
El informe además muestra que, durante junio de este año, son las mujeres, jóvenes, personas de menores ingresos y los habitantes de regiones los grupos que registraron las mayores tasas de estrés a nivel nacional. En tanto, los hombres, habitantes de Santiago, personas de mayores ingresos y de mayor edad registran los menores niveles de estrés.
En particular, los hombres en un 46% señalaron tener estrés, porcentaje bastante inferior al observado en mujeres, con un 57%. Similar diferencia se presenta entre los consumidores de Santiago, con un 46%, respecto a sus pares de otras zonas del país, con un 56%.
Patrones de consumo
Otro tema que tocó el estudio fue el de los patrones de consumo. En ese sentido, George Lever, gerente de estudios de la CCS, destacó que “durante los últimos meses se registra un aumento en la intención de compra de bienes de primera necesidad, lo que tiene como contrapartida un descenso en la bienes durables y semidurables, relacionado al aumento de la inflación y la menor liquidez en los hogares, producto esto último del término del IFE y al ajuste de la economía″.
Así, la preferencia por las compras de alimentos o de supermercado fue del 70%, seguido por la compra de artículos de limpieza e higiene personal (55%). Mientras, el vestuario marcó un 23%, los artículos para el hogar y decoración un 12% y, finalmente, los ítems de tecnología y/o electrohogar un 10%, los cuales mostraron una baja en los últimos meses en la intención de compra.
Por otro lado, en el caso de servicios presenciales, se aprecian ajustes durante el primer semestre en restaurantes -preferencia de compra que baja al 15%- y viajes con apenas un 2%, lo cual, de acuerdo al estudio, se entiende por factores estacionales. Mientras, la categoría de cines y teatros está en un proceso de paulatina recuperación, llegando a un 8%.
Los supermercados se mantienen como el lugar con mayor intensidad de visita (58% de los consumidores), seguidos por centros comerciales (39%), restaurantes y cafés (37%), y cines (34%), éste último con una importante recuperación en los últimos meses.
Respecto de los canales de venta, durante el segundo trimestre, un 57% de los consumidores se inclina por realizar tanto compras físicas como online. Según explica George Lever, “se confirma una tendencia a la consolidación de hábitos multicanal, con una clara mayoría optando por más de un medio de compra. Quienes esperan comprar solo online, en tanto, aumentan a un 18% y superan a los que seguirán exclusivamente en tiendas físicas”.
El informe revela que se mantiene la intensidad de compras en e-commerce, que alcanzó máximos históricos cercanos al 80% de los consumidores durante las cuarentenas, y que pese al desconfinamiento se mantiene en un 75% a mediados de este año. No obstante, la intensidad de compra online ha disminuido. El 48% (un máximo desde el inicio de la pandemia) señala que debido al desconfinamiento ha disminuido su frecuencia de compras en Internet.
A partir de la reapertura del comercio se ha ido normalizando el hábito de visita a centros comerciales, con el 62% de los consumidores que afirmaron haber visitado uno durante los últimos 30 días, y un peak de 74% en la última Navidad.
Perspectivas
Con respecto a las perspectivas de los consumidores, el estudio también reveló que durante la primera mitad del año se mantiene la preferencia por la multicanalidad hacia el futuro. Así, en junio quienes señalaron que esperan seguir comprando en canales físicos y online alcanzaron un 67%, los que declaran que usarán solo online subieron al 20% y los que declaran que seguirán solo en tiendas físicas se redujeron al 8%. Esto en comparación al mes anterior, en que los porcentajes fueron de 73%, 12% y 10%, respectivamente.
En tanto, el 67% de los consumidores proyecta que visitará menos que antes los centros comerciales. Asimismo, la mitad de los consumidores piensa que los nuevos hábitos adoptados durante la pandemia serán permanentes y menos del 20% piensa que permanecerán solo mientras dure la pandemia.
Situación laboral
El porcentaje de consumidores que se declara trabajando alcanzó en el segundo trimestre su máximo desde el inicio de la pandemia: un 68% si se incluye a quienes trabajan y estudian. Sin embargo, también aumentaron quienes se declaran desempleados y buscando trabajo (15% a fines de 2021, 18% en el primer trimestre de este año, 21% en el segundo).
En ese contexto, las causales de desempleo por despido aumentaron levemente al 31%, mientras que por cierre de la empresa subieron de 6% en el primer trimestre a 14% en el segundo, su nivel más alto en 12 meses.
Otro aspecto del mundo laboral es que la presencialidad física en el trabajo alcanzó su máximo en el segundo trimestre desde el inicio de la pandemia, con un 70% declarando esa modalidad. El teletrabajo puro, que superó el 30% en el segundo trimestre de 2021, se repliega a un rango entre el 10% y 15%. La modalidad híbrida, en tanto, se redujo al 16% en el segundo trimestre.
Impacto de la inflación
En otros temas, con respecto al impacto de la inflación en la vida de los consumidores, estos han reaccionado de distintas maneras. Así, el 49% declara haber dejado de comprar algunos tipos de alimentos, el 46% ha utilizado sus ahorros para compensar el aumento en el costo de vida y el 42% ha reducido gastos en entretención. Entre las otras medidas destacan también el dejar de pagar obligaciones financieras (30%), modificar el medio de transporte (24%) y recurrir a créditos (21%)
En cuanto a las expectativas sobre la economía, a junio un 67% espera que la situación empeore, muy por sobre el 46% de comienzos de año, mientras que un 18% espera que mejore (30% en enero).