La propagación de la variante delta ha encendido las alarmas y las autoridades de varios países, desde Bangladesh hasta Australia, pasando por Israel y algunos países europeos, están tomando medidas para contener que se siga extendiendo la altamente contagiosa variante del coronavirus.

Si bien las campañas de vacunación han reducido las infecciones en la mayoría de las naciones ricas, el aumento de casos producto de la variante delta ha acrecentado los temores de nuevas oleadas de un virus que ya ha matado a casi cuatro millones de personas en todo el mundo.

Actualmente hay mucha preocupación sobre la variante delta”, dijo el viernes el jefe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una conferencia de prensa.

Delta es la más transmisible de las variantes identificadas hasta ahora, se ha identificado en al menos 85 países y se está extendiendo rápidamente entre las poblaciones no vacunadas”, añadió.

Portugal, España y Alemania emitieron nuevas restricciones de viaje en un intento por limitar la propagación de la variante delta. Así, desde ayer, los británicos no vacunados que viajen a Portugal deberán pasar por una cuarentena obligatoria durante dos semanas, según una orden publicada por el gobierno portugués.

La medida fue tomada después de que la canciller alemana, Angela Merkel, criticara a Portugal la semana pasada por permitir que los turistas británicos viajen al país entre mediados de mayo y principios de junio, mientras que la variante delta circulaba en Reino Unido. De esta forma, Portugal se convirtió en el primer país de la Unión Europea en anunciar que la variante era ahora dominante en su territorio.

En la misma línea, Alemania anunció la entrada restringida desde Portugal y Rusia el viernes después de que el Instituto Robert Koch clasificara a los dos países como “varias áreas variantes”. Solo los ciudadanos y residentes alemanes podrán volver a ingresar al país siempre que pasen por una cuarentena obligatoria de 14 días, incluso para aquellos que estén completamente vacunados. La medida entrará en vigor hoy, y se esperaba que una oleada de turistas alemanes de última hora volvieran a sus hogares antes de que entrara en vigor la restricción.

Francia, por su parte, anunció la semana pasada que estaba agregando a Rusia a su “lista roja” de 21 países sujetos a severas restricciones de viaje debido a la preocupación por el aumento de las infecciones por coronavirus.

De Sydney hasta Indonesia

En Sydney, la ciudad más grande de Australia, comenzó a regir un bloqueo de dos semanas y se ordenó a las personas que se quedaran en casa, excepto para viajes esenciales. Las nuevas restricciones de Sydney se aplican a unos cinco millones de personas, junto con cientos de miles de personas que viven en pueblos cercanos. El ministro de Respuesta a Covid-19 de Australia, Chris Hipkins, dijo que la suspensión daría a los funcionarios tiempo para considerar medidas “para hacer que la burbuja sea más segura, como las pruebas previas a la salida para todos los vuelos” entre los dos países.

En la misma línea, Nueva Zelandia, citando “múltiples brotes” en Australia, anunció una suspensión de tres días de su acuerdo de viaje libre de cuarentena con su vecino más grande.

Sudáfrica extendió el domingo un toque de queda nocturno e introdujo una prohibición de reuniones, venta de alcohol, cenas en interiores y algunos viajes nacionales durante 14 días, dijo el presidente Cyril Ramaphosa.

Mientras que en Bangladesh, el gobierno advirtió de un aumento “peligroso y alarmante” de las infecciones relacionadas con la variante delta y desde ayer detuvo todo el transporte público, lo que provocó que miles de trabajadores migrantes huyeran de la capital, Dhaka, antes de que se aplicaran las restricciones. Además, las restricciones incluyen el cierre de las oficinas durante una semana y solo se permite el transporte relacionado con la salud.

Las autoridades tailandesas declararon un bloqueo limitado de un mes en la capital, Bangkok, y las provincias vecinas. Y Malasia extendió un cierre nacional que ayer estaba programado para relajarse.

En Indonesia, el Presidente Joko Widodo dijo que el país de 270 millones de habitantes se enfrenta a una “situación extraordinaria” y se comprometió a responder con “políticas rápidas y adecuadas”. El país registró más de 21.000 nuevas infecciones el sábado, el recuento diario más alto hasta el momento.

La variante delta, que fue identificada por primera vez en India en abril, es tan contagiosa que los expertos dicen que más del 80 % de la población necesitaría ser inoculada para contenerla, un objetivo desafiante incluso para naciones con importantes programas de vacunación. La variante ahora es responsable de más del 90% de todas las nuevas infecciones en Reino Unido y alrededor del 30% en Estados Unidos.

Los expertos en salud han advertido, dice The Washington Post, que está en camino de convertirse en la versión más dominante del coronavirus en todo el mundo. La Organización Mundial de la Salud dijo la semana pasada que se ha detectado en al menos 92 países.

En Taiwán, que informó su primer caso de delta el sábado, los Centros para el Control de Enfermedades locales anunciaron nuevas restricciones para las personas que llegan de siete “países de alto riesgo”: Bangladesh, Reino Unido, Brasil, India, Indonesia, Israel y Perú.

Hong Kong también dijo que prohibirá todos los vuelos de pasajeros desde Reino Unido a partir de esta semana, debido al creciente número de nuevos casos de coronavirus y “la cepa del virus variante delta generalizada allí”, según un comunicado del gobierno.

El gobierno de Hong Kong explicó que la ciudad también registró varios casos de la variante L452R, una mutación vinculada a la delta, en personas llegadas de Reino Unido. El territorio confirmó la semana pasada su primer caso local de Covid-19 relacionado con la variante, lo que puso fin a 16 días seguidos sin casos locales.

Israel, que tiene una de las tasas de vacunación más altas del mundo, también ha visto un aumento en los casos de delta en las últimas semanas, lo que ha provocado que las autoridades restablezcan un mandato de máscara para interiores que se eliminó hace solo dos semanas.

El gobierno israelí, dice The Washington Post, confía en la alta tasa de vacunación del país para proteger a los residentes de las hospitalizaciones y muertes relacionadas con el virus.