Citando informes sobre una supuesta agresión de parte de Ucrania, el Presidente ruso, Vladimir Putin, reconoció los territorios en el Donbas, al este de Ucrania, como estados independientes. El mandatario hizo este anuncio en un discurso televisado horas después de celebrar una reunión del Consejo de Seguridad en la que se discutió el asunto. Los miembros del Consejo se pronunciaron unánimemente a favor del reconocimiento de los territorios como estados independientes.

El Parlamento de Rusia ratificará la decisión el 22 de febrero, así como un acuerdo de cooperación entre Rusia y los dos “estados” con centros en las ciudades de Donetsk y Lugansk.

En su discurso, Putin habló sobre la historia y afirmó falsamente que “la Ucrania moderna fue creada por Rusia” y que partes de Rusia fueron “entregadas” erróneamente a Ucrania durante la época soviética, indicó el diario Kyiv Independent.

En el largo discurso, Putin contó su versión de la historia del siglo XX. Reiteró su visión de la desintegración de la Unión Soviética como una tragedia y dijo que Ucrania era un estado creado artificialmente. Lamentó que la URSS diera demasiada libertad a las naciones que formaban parte de ella y dejara espacio para el nacionalismo.

El hecho de que Rusia reconozca los territorios ocupados del este de Ucrania como estados independientes va en contra de los Acuerdos de Minsk, que exigían que Ucrania otorgara autonomía a los territorios ocupados por Rusia después de que el Kremlin y sus representantes retiraran sus fuerzas de la región.

La decisión de Putin de aumentar las tensiones marca uno de los momentos más graves de la crisis de Ucrania y se produce cuando los funcionarios occidentales advirtieron que las tropas rusas desplegadas alrededor de la frontera de Ucrania estaban tomando posiciones para permitir una invasión inminente. Para los expertos el anuncio de reconocer las regiones del este de Ucrania podría ser usado como un pretexto para justificar una incursión en los territorios. De hecho, ayer Putin ordenó a su ministerio de defensa que enviara fuerzas de paz rusas a las regiones de Donetsk y Lugansk.

“La situación en Donbas se está volviendo crítica”, dijo Putin en un discurso televisado en vivo. “Ucrania no es solo un vecino. Es una parte inherente de nuestra propia historia, cultura y espacio espiritual”, dijo.

Previamente, los líderes de Donetsk y Lugansk, Denis Pushilin y Leonid Pasechnik le pidieron a Putin que reconociera la independencia de ambos territorios. Así, durante la reunión, Dmitri Medvedev, presidente de Rusia entre 2008 y 2012 y actual vicepresidente del Consejo de Seguridad, declaró que en el Donbas viven “unos 800.000 rusos” que “no solo hablan ruso, sino que son ciudadanos de nuestro país”. “Si la situación se sigue desarrollando sin mejoras, la única solución será reconocer a las repúblicas de Donbas”, defendió.

En la mañana de ayer Moscú afirmó que había destruido dos vehículos militares ucranianos que se adentraron en su territorio, matando a cinco personas. El incidente no confirmado sería el primer enfrentamiento directo con las fuerzas ucranianas desde que Moscú movilizó 190.000 soldados en su frontera.

Antes del discurso, Putin llamó al Presidente francés Emmanuel Macron y al canciller alemán Olaf Scholz y les comunicó su decisión, dijo el Kremlin en un comunicado. Los líderes europeos expresaron su decepción con esta situación, pero indicaron su disposición a continuar los contactos, dijo el Kremlin.

La decisión de reconocer a las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk se produjo cuando Kiev solicitó al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas una reunión urgente para abordar la amenaza de una invasión rusa.

El ministro de Relaciones Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, dijo que hizo la solicitud ayer después de una escalada sustancial en la actividad militar entre las fuerzas respaldadas por Rusia y las tropas del gobierno de Kiev.

Los mercados respondieron con alarma. El índice bursátil Moex de Rusia cerró con una caída del 10,5%, su caída más pronunciada desde que Rusia se apoderó de Crimea en 2014.

Michael Carpenter, embajador de Estados Unidos ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, dijo que cualquier movimiento ruso para reconocer a las repúblicas populares separatistas de Donetsk y Lugansk era “deplorable” y un “repudio total” de los acuerdos de Minsk que intentaban calmar el conflicto en el este de Ucrania, consignó el diario Financial Times.

“Si se lleva a cabo, esto nuevamente resultaría en la alteración del orden internacional basado en reglas, bajo la amenaza de la fuerza”, dijo Carpenter en una reunión de la OSCE en Viena.

Putin y el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden, habrían aceptado “el principio” de una cumbre para aliviar las tensiones, dijo la Casa Blanca, pero hasta ahora el Kremlin ha minimizado las expectativas de que realmente se lleve a cabo.

Tras conocerse el anuncio de Putin sobre el reconocimiento de las regiones del este de Ucrania, se señaló que el Presidente Biden emitirá sanciones, una medida similar fue anunciada de parte de la Unión Europea.

¿Qué son las repúblicas de Donetsk y Lugansk?

Más de 14.000 personas han muerto en el conflicto en el este de Ucrania desde que Moscú anexó la península de Crimea en 2014. Ucrania y los países occidentales han dicho que había evidencia de que Rusia había estado proporcionando armas y combatientes para alimentar la guerra separatista, algo que Moscú niega.

Las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, dependen casi por completo del apoyo del Kremlin, declararon su independencia de Kiev en abril de 2014 después de que las milicias respaldadas por Rusia tomaron el control de las oficinas del gobierno local y otras infraestructuras tras la invasión de Crimea por parte de Moscú.

En la frontera con Rusia en el flanco este de Ucrania, las regiones mayoritariamente de habla rusa albergan a más de 3 millones de personas y han recibido grandes cantidades de asistencia financiera, humanitaria y militar del Kremlin. El apoyo de Moscú a las regiones se produjo después de que el movimiento prooccidental Maidan derrocara al presidente prorruso de Ucrania, Viktor Yanukovich en febrero de 2014.

Según los acuerdos de Minsk de 2015, conversaciones de paz negociadas por Francia y Alemania, un alto el fuego dejó a los separatistas con el control de facto de aproximadamente un tercio de los distritos administrativos ucranianos de Donetsk y Lugansk, con una línea de control fuertemente fortificada que los separa de las tropas ucranianas.

Ucrania describe las regiones como “territorios temporalmente ocupados” y los acuerdos de Minsk prevén su eventual regreso a Kiev. Pero tanto Kiev como Moscú no han implementado los términos de los acuerdos, dejando el estatus de los territorios en una suerte de limbo.

Al mismo tiempo, Rusia ha pasado los últimos ocho años aumentando su influencia sobre los territorios. Ha otorgado pasaportes y ciudadanía a alrededor de 800.000 de sus ciudadanos, dijeron funcionarios rusos el lunes, al tiempo que enfatizaron la necesidad de que el Kremlin los proteja.

El reconocimiento de Rusia de las dos regiones, la llamada República Popular de Donetsk y la República Popular de Lugansk, podría permitir que los líderes separatistas soliciten ayuda militar de Rusia, facilitando aún más el camino para una ofensiva militar, dicen funcionarios ucranianos. Ucrania probablemente interpretaría eso como tropas rusas entrando en territorio ucraniano.

¿Cuál es la visión de Putin sobre Ucrania?

Para los expertos, la raíz del interés de Putin en Rusia se encuentra -en parte- en su idea de tener una gran misión histórica, incluida la resurrección del Imperio Ruso o la Unión Soviética y proyectar su poderío geopolítico en todo el mundo.

Las opiniones de Putin sobre Ucrania se cristalizaron en un artículo que escribió en 2021, recordó el diario Kyiv Independent. En él, afirmó que “los rusos y los ucranianos son un solo pueblo, un todo” y argumentó que un estado nacional ucraniano separado de Rusia es una entidad artificial y nacida muerta.

Culpó a Occidente por dividir a las naciones rusa y ucraniana y caracterizó esta división como una “tragedia”. Se hizo eco de la afirmación anterior de Putin de que el colapso de la Unión Soviética en 1991 fue “la mayor catástrofe geopolítica del siglo XX”.

Ucrania fue considerada como una suerte de “joya de la corona” del Imperio Ruso y la Unión Soviética. La obsesión de Putin con Ucrania también se debe al hecho de que una Ucrania democrática integrada en Occidente sería vista como un modelo para los opositores a su régimen autoritario, dijo el analista político ruso Georgy Satarov al periódico Kyiv Independent.