“La pandemia sigue y debemos mantener las medidas de autocuidado (...). No vamos a volver a la normalidad hasta después del 30 de junio”, recalcó ayer el ministro de Salud, Enrique Paris, a un año del primer caso confirmado de Covid-19 en el país y mientras recibía 200 mil dosis de la vacuna de Pfizer-BioNTech, que permitirán continuar con el plan de vacunación que, hasta el cierre de esta edición, contaba con 3.646.970 de personas inmunizadas.

A la vez, la subsecretaria de Redes Asistenciales confirmó que los prestadores públicos y privados deberán llegar, en tres semanas, al 100% de la capacidad de camas UCI habilitadas para el peak de la pandemia y, como consecuencia, algunos recintos deberán suspender la actividad quirúrgica electiva. ¿La razón? El notorio aumento de casos de coronavirus que se registra hace al menos dos semanas en el país y particularmente en la Región Metropolitana.

Y es que a propósito de esta alza, ya se han tomado las primeras medidas. A partir de hoy, cerca de 2,1 millones de habitantes de la capital retrocederán a fase de Transición, lo que implica permanecer en cuarentena durante los fines de semana. Así, Ñuñoa, Estación Central, Puente Alto, La Florida, Cerrillos, Santiago y San Pedro entrarán a ese régimen.

Pero no son los únicos. Acorde a los últimos informes epidemiológicos del Ministerio de Salud, un total de 15 comunas de la capital alcanzaron durante esta última semana la mayor incidencia de casos activos en siete meses, entre fines de julio y principios de agosto. Y en ese listado figuran solo seis de las siete que hoy retrocederán de etapa en el plan “Paso a Paso”.

El académico en Salud Pública de la Universidad de Santiago (Usach) Claudio Castillo precisa que según las cifras que disponibiliza a diario el Minsal, “las variaciones del promedio móvil de los casos de coronavirus de los últimos siete días a nivel país fue de 16%, y en la RM, de un 18%. Si se consideran los últimos 14 días a nivel país el alza es de un 7%, pero en la RM el alza es de un 18%”.

La Región Metropolitana, más allá de ser la zona con mayor población, representa también la mayor capacidad hospitalaria y de crecimiento de ésta, de manera que cualquier aumento rápido y sostenido de casos en la región tendrá impacto en la respuesta que se les puede dar también a otros territorios. Eso también aumenta el riesgo de no poder responder si las hospitalizaciones siguen creciendo a la velocidad que han mostrado los datos en los últimos días”, añade Castillo, quien además destaca la alta positividad reportada a nivel nacional ayer por Salud: 10,9%, la más alta desde julio del año pasado.

¿Tercera ola y cuarentenas?

Mirando el pulso de la pandemia de cerca en las unidades de paciente crítico (UPC), el médico intensivista y jefe de la UCI en Clínica Indisa, Sebastián Ugarte, advierte que, lamentablemente, “la campaña de vacunación no va a alcanzar a frenar esta tercera ola”, pues si bien puede evidenciarse en un par de semanas una “inmunidad de grupo” en los adultos mayores que comiencen a recibir segundas dosis, el grupo etario que actualmente está contagiándose aún no ha recibido la vacuna.

“Ha habido un incremento en la tasa de hospitalizaciones y en la consulta de urgencia de pacientes con enfermedades respiratorias, en las que se confirma diagnóstico de Covid-19. De tener, hace un mes atrás, la mitad de las camas UCI con pacientes Covid-19, hoy ha pasado a ser la patología predominante. Cama que se desocupa se está usando con pacientes con esta patología, hay más demanda de casos y un cambio en el tipo de pacientes que estamos viendo también. Es evidente cómo el promedio de edad de los pacientes hospitalizados en UCI ha bajado, no son adultos mayores con coronavirus, sino que pacientes más jóvenes”, describe el médico.

Frente a un eventual empeoramiento del virus, desde el Consejo Asesor Covid-19, la epidemióloga María Teresa Valenzuela advierte que como parte del plan “Paso a Paso”, “es posible que algunas zonas entren en cuarentena si la situación se ve complicada, porque el indicador más relevante es el uso de camas críticas y los fallecimientos. Si eso sigue aumentando, va a haber un momento en que las comunas que están generando más números de casos van a tener que retroceder al confinamiento, sabiendo que es una medida que impacta la salud mental”.

La experta recalca que pese a que hay un buen número de personas inmunizadas, “las vacunas todavía no van ejercer su rol protector. De forma muy esperanzadora esto va a ser a mediados de abril, lo que debería incidir en los casos graves de enfermedad, en las hospitalizaciones y en los fallecimientos”.

En ese sentido, el epidemiólogo de la Universidad de Chile Gabriel Cavada explica que de aquí a tres semanas o un mes, podría evidenciarse “un peak comparable al que ocurrió en junio, con la diferencia de que los muertos y la ocupación UCI será menor, porque vamos a empezar a notar los primeros efectos de la vacunación”, además de que los contagios se están dando en una población relativamente más sana, como los jóvenes. El experto en bioestadística añade que en la última semana la pandemia tuvo una expansión promedio del 14%.

Sobre aplicar medidas estrictas, como los confinamientos, “el objetivo final de las cuarentenas siempre va a ser que no se cargue el sistema hospitalario y evitar muertes. Si sigue este buen avance de la vacunación, una nueva cuarentena generaría más malestar social que otra cosa. Ahora, todavía tenemos que ser cautos al mirar las cifras epidemiológicas: es probable que marzo sea un mes complejo, con una epidemia grande, pero menos complicada en términos clínicos de lo que vimos durante el peak”.