El piloto francés Sébastien Loeb afirmó hoy que ha perdido su última oportunidad de ganar el Dakar tras abandonar la actual edición y anunciar que, tras la retirada de Peugeot de la competición, piensa centrarse en otras disciplinas del automovilismo y no regresar por el momento al Dakar.
Tras conducir el coche al campamento sin poder completar el especial del día, el alsaciano comentó que su coche cayó a un agujero que no vio cuando intentaba alcanzar la cima de una duna.
"Era muy complicado, porque eran dunas muy blandas. Queríamos llegar arriba y aceleré, pero entre el punto donde yo estaba y la cima había un agujero que no vi. Estaba subiendo y de repente el coche se fue hacia abajo. Daniel se hizo daño", dijo, delante su coche, que llegó con la parte frontal dañada. Precisamente la situación médica de Daniel Elena, su navegante de toda la vida, le hizo imposible continuar, pues el monegasco sufrió una lesión coccígea que le impide estar sentado mucho tiempo. "Sólo de pie me siento bien", dijo el copiloto.
El galo, nueve veces campeón del mundo de rally, lamentó tener que abandonar la carrera justo cuando terminaban las etapas de dunas sobre el desierto de Perú, que en su opinión era con diferencia la parte más complicada.
Comentó que se veía con posibilidades de luchar por el triunfo en las etapas por Bolivia y Argentina, por caminos sin tanta navegación, más propicios para su estilo de conducción. "He perdido mi última oportunidad de ganar el Dakar", sostuvo.
Sostuvo que los tres años que ha corrido el Dakar con Peugeot "ha sido una gran experiencia, con momentos muy buenos pero también algunos otros malos".
"Ha sido bueno descubrir esta experiencia. Es algo completamente diferente a lo que estoy acostumbrado a hacer", agregó Loeb, quien espera correr algún que otro rally en breve.