Inter de Milán está de vuelta en la Champions. El equipo lombardo venció 3-1 a Sheriff Tiraspol de Moldavia para lograr su primer triunfo en el Grupo D. Una actuación redonda, donde Arturo Vidal fue la gran figura, tras completar su mejor encuentro de la temporada.

El chileno se robó todas las miradas. Simone Inzaghi sorprendió con la inclusión del mediocampista desde el inicio y el oriundo de San Joaquín respondió a cabalidad a esa confianza.

El motor de la Roja repitió lo que viene haciendo en la Roja. Se paró en la cinco de cinco volantes que puso Inzaghino, desde el medio a la izquierda, para convertirse en el gran catalizador del cuadro italiano.

Metió, distribuyó y ganó las divididas. Rescató la pelota, empujó a su equipo hacia adelante y se las ingenió para siempre aparecer en zona de remate, sobre todo cuando las marcas del Sheriff se marchaban con sus compañeros de ataque.

Porque los moldavos hicieron un duelo más que correcto en la primera media hora. Defendieron con mucha gente, pero también aprovecharon la velocidad de sus jugadores en punta para inquietar al meta Samir Handanovic.

Llegaron los goles

Cuando se lo perdieron Edin Dzeko y Denzel Dumfries, volvían los viejos fantasmas al Meazza. Los mismos que hablan de un equipo con profundidad, pero sin gol.

Una ecuación que comenzó a solucionar a los 34 minutos con un balón detenido. Un córner desde la izquierda encontró la cabeza de Vidal, quien peinó de manera perfecta para que Dzeko clavara un zurdazo alto.

Y aunque Cristiano casi empató en el final del primer tiempo, tras un rápido contragolpe, lo cierto es que el marcador no se movió más hasta la segunda fracción del encuentro.

Vidal lo encamina

Sin embargo, la gran sorpresa del Grupo D lo volvió a hacer. Cuando se jugaba el minuto 51, un tiro libre directo de Sebastien Thill dejó sin reacción a Handanovic para el 1-1 parcial.

Al contrario de otras jornadas, esta vez el Inter no se desesperó. Siguió con su libreto y recuperó el volumen ofensivo que alcanzó su peak en la primera media hora del partido.

A los 58 minutos, Vidal y Dzeko intercambiaron papeles. Esta vez fue el bosnio quien dejó solo al chileno, quien con su olfato característico remató con fuerza para el 2-1, justo premio para el trajín que mostró el ex Barcelona tanto en defensa como en ataque.

El segundo tanto tranquilizó a los peninsulares y el tanto del central Stefan de Vrij no hizo más que refrendarlo, a los 67′. Una conquista que dio nuevos aires a los italianos que, con el ingreso de Alexis Sánchez a los 75 minutos (al mismo tiempo en que salió su compatriota), recuperó las ganas y las ideas para aumentar las cifras.

En la primera pelota que tocó el tocopillano, dejó solo a Dumfries, quien no pudo rematar con comodidad. Con el resultado en el bolsillo, Inter administró las acciones y apenas pasó zozobras.

Total el daño ya estaba hecho. Inter logró su primera victoria en esta Champions y mantiene viva la opción de pasar a octavos. Lo Más importante, es que recuperó a los dos chilenos: bien por el club y mejor por la selección chilena.

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