Jorge Barrera contesta el teléfono desde Ciudad de México, donde está radicado desde 2014. Está molesto por la situación que vive su representado Felipe Flores: su casa en El Remanso de Chicureo será subastada el próximo 18 de junio, luego de que Blanco y Negro le ganara una demanda al delantero, por una deuda de US$ 100 mil.

El agente responsabiliza a Aníbal Mosa, timonel de la sociedad anónima, de este conflicto. "Me sorprende que Mosa persevere en un escenario donde la víctima es un jugador formado por el club y que lo ama por sobre todas las cosas. Aquí, más allá de lo que es válido o no, hay un tema de principios", señala a La Tercera.

"He manejado toda la carrera de Felipe y no está pasando un momento agradable. Él está tremendamente afectado por todo esto, pero los argumentos están de lado suyo, y no lo digo porque sea mi representado. La cuestión es así: Felipe tenía contrato vigente, a mediados de 2015. Habían ganado la estrella 30. Lo llama Juan Gutiérrez, en ese entonces director deportivo, y le dice que si bien le queda un año de contrato, no estaba en los planes de Colo Colo y que tienen conversaciones con Santiago Wanderers para que juegue ahí ese último año", revela.

"Gutiérrez le explica que necesitaban ese presupuesto para traer a un jugador de otro perfil. Felipe no lo entendía, porque consideraba que había hecho un buen torneo. Al final, me consulta y yo le digo que en Wanderers se va a desvalorizar. Hubo mucha presión de Colo Colo para que aceptara irse a Wanderers, pero se llegó a un acuerdo de terminar el contrato con un año de anticipación y el club estuvo de acuerdo con su finiquito", agrega.

Y aquí viene el problema, según Barrera. "Lo citan a las cuatro de la tarde a una notaría. Entonces llega el gerente general Alejandro Paul y le dice que Mosa pide que indemnice a Colo Colo con 100 mil dolares. Eso no correspondía, porque Colo Colo se estaba ahorrando un año de contrato y más encima le estaban cobrando. Le dije que no lo firmara, pero Felipe ama a Colo Colo y confió. Él ganaba 14 millones mensuales y gracias a que iba a finiquitar podrían usar ese dinero para traer otro jugador", sostiene.

"Cuando llega al Tijuana, al quinto partido echan al entrenador que solicitó a Felipe, y Tijuana lamentablemente no le puede seguir cumpliendo el contrato. Entonces demandó al club y estuvo seis meses sin jugar. Luego tuvo que retirar la demanda para poder jugar en el Veracruz, pero otra vez le ocurrió lo mismo y no jugó. Y ahora tiene un contrato mucho menor en Antofagstas, pero Mosa no considera eso y perservera en este asunto", reclama.

"Felipe se ofreció a jugar gratis en Colo Colo para poder pagar la deuda, pero Mosa le dijo que no estaba en los planes. Luego habló con Gabriel Ruiz Tagle y este le dice que no tiene ningún problema, que el problema lo tiene Mosa, y que el directorio está dividido. Aquí, el vicio fundamental de este tema es la práctica de un club como Colo Colo. A Felipe jamás le han pasado dinero. Este es un tema laboral entre un club y un jugador que ellos llevaron a la justicia ordinaria. No se cómo ve la FIFA todo esto, que te hagan firmar un pagaré y te manden a la justicia ordinaria. Le dije que denunciara esto, pero él lo mantiene privado porque ama a Colo Colo. Es una práctica impresentable viniendo de Colo Colo, propia de un club de baja categoría, con problemas económicos. Qué son 100 mil doláres para ellos", alega.

"Felipe no quiso ir con Héctor Tapia a Perú y dilató su renovación con Antofagasta porque estaba esperando a Colo Colo. Mario Salas evaluó su incorporación, pero prefirió no meterse por el lío judicial que había. Aquí hay un fondo ético. Felipe se formó en Colo Colo, hizo el gol que le dio la 30, ha sido insultando en la cancha por defender a Colo Colo, Johnny Herrera le puso hasta un sobrenombre... y además ofreció una forma de pago. Él ya no gana lo que ganaba en Colo Colo y el club no lo deja pagar un millón mensual, que es la propuesta que le hizo hoy al abogado de Blanco y Negro. Esteban Paredes ha hablado dos veces para tratar de convencer a Mosa. Si se la rematan es lamentable para el fútbol chileno. No sé qué opina el Sifup, también les hemos pedido ayuda. Está claro que si hay un perjuicio patrimonial Felipe va a ir a la FIFA", asegura Barrera.