Emile Ritter asomaba como la carta natural en el salto del esquí náutico después de la ausencia de Felipe Miranda, el deportista chileno con más medallas en los Panamericanos. Y respondió con creces a esa expectativa. El exponente nacional consiguió un registro de 64,7 metros, que le valió la presea de oro, la segunda de esta disciplina en la historia del megaevento.
El chileno estableció la marca en el segundo intento, lo que fue imposible de igualar para el canadiense Dorien Llewellyn, quien alcanzó 64,5 metros, y para el argentino Tomás Giorgis, quien logró 63,3 metros. Cuarto resultó el chileno Martín Labra, quien terminó con una distancia de 61,3 metros.
“La verdad es que estoy muy emocionado. Fue un año muy largo, entrar al equipo fue complicado. Había nervios, ayer en la semifinal estaba muy nervioso. En Lima quedé cuarto y hoy llegué a la final. Tenía la confianza de que podía estar en el podio. Traté de no pensar en sacar el oro, sino que disfrutarlo y confiar en eso”, expresó el ganador.
“Como familia estamos viviendo en Estados Unidos, es un triunfo familiar. Nunca salto solo”, agradeció. Y añadió sobre su marca: “Sabía que era un buen salto, una marca difícil de lograr. Preferí no ver, estaba entregado a lo que se diera”, indicó.
Finalmente reveló una anécdota con Felipe Miranda, con quien disputó el cupo para estar en Santiago 2023. “Con Felipe estuvimos compitiendo para entrar al equipo, se dio que salté más lejos. De hecho, los esquíes que usé son los de Felipe, porque rompí los míos”, confesó.
Varas se queda con la plata
En tanto, otra buena noticia para el Team Chile entregó la esquiadora náutica Agustina Varas, quien estuvo a un paso de quedarse con el oro en la prueba de salto. Sin embargo, una polémica decisión terminó favoreciendo a la representante de Estados Unidos, quien finalmente fue la ganadora de la prueba.
La deportista nacional, actual campeona mundial Sub 21, tuvo un desempeño impecable en la Laguna de Los Morros en San Bernardo, el lugar que la vio crecer en esta disciplina. El registro que alcanzó llegó a los 50,2 metros, lo que le estaba dando la medalla dorada.
Cuando todos celebraban el hito, finalmente un error en el registro en el salto de la campeona mundial Reginna Jaquess, obligó a los jueces a otorgarle un cuarto intento, que la norteamericana supo aprovechar a la perfección, marcando 52,2 metros, lo que le valió quedarse con la presea máxima. Además, aseguró el triunfo en el overall, pues también se impuso en slalom.
En tanto, el bronce fue para la canadiense Paige Rini, quien completó el podio.