Matthias Walkner (31 años) atribuyó su primera corona del Dakar, en buena medida, a la fortuna, dadas las incontables bajas que sufrió la competencia de motos.
"He sido el que más suerte ha tenido. Hace falta suerte, a veces se tiene y otras no. Esta vez la suerte ha estado de mi lado", comentó Walkner, primer austríaco que gana el Dakar, pese a que KTM, la fabricante de ese país, se ha adjudicado todos los Dakar desde 2001.
El piloto, quien en 2017 fue segundo, reconoció que su objetivo era terminar en el podio, pero no se imaginaba que lo haría en el escalón más alto. "Es de locos. La carrera ha estado muy reñida y la décima etapa ha resultado clave en este rally. Es un sueño hecho realidad. El Dakar ha sido tremendo, con un nivel elevadísimo", dijo Walkner, en referencia al único tramo que ganó en esta edición y que le sirvió para ponerse líder, posición que nunca más abandonó.