Una final 75% chilena se vivió en el último turno del Chile Open. Por un lado, la dupla de Alejandro Tabilo y Tomás Barrios, y por el otro, la de Matías Soto y el brasileño Orlando Luz. Todos buscaban su primer título ATP y en el caso del oriundo de Copiapó, su revancha, tras perder dramáticamente en la final de dobles del año pasado en San Carlos de Apoquindo. Sin embargo, la victoria fue para los primeros, por 6-2 y 6-4.
El triunfo, además, le permitirá subir 480 lugares a Tomi para ubicarse en la casilla 285, mientras que Ale trepará 611 puestos para ubicarse 266 a partir del lunes 4 de marzo.
El duelo tuvo el aliciente de que Tabilo venía con la motivación a tope, aunque con la preocupación de cuidar el físico para la definición de singles ante el argentino Sebastián Báez, tras las más de dos horas y media que estuvo en cancha en las semifinales ante Corentin Moutet. Motivación a tope y energía suficiente para partir quebrando el servicio de Soto y el de Luz consecutivamente.
Y si bien la dupla chileno-brasileña rescató una ruptura en el turno de Barrios, eso no importó mucho, pues un nuevo quiebre sobre el servicio de Soto sentenció prácticamente el set. Luego, con el saque del chillanejo, cerraron de gran forma esa primera manga.
Abrazo emocionado
El segundo parcial tuvo una demostración de fuerzas más parejas en el comienzo. De hecho, Soto y Luz tuvieron chances de quebrar en el quinto juego. Sin embargo, la dupla titular de Copa Davis logró zafar del angustioso momento, mostrando un tenis muy equilibrado y con un Tabilo bastante sólido en la red.
Así, el desenlace del encuentro se comenzó a estructura en el noveno juego, donde Soto no pudo sostener su servicio ni tampoco el largo rally con Barrios, que le permitió obtener el quiebre decisivo, para que luego Tabilo cerrara la victoria con su saque. Abrazo emocionado de los ganadores, que celebraron el triunfo que les da su primer título ATP y que cierra la jornada de ensueño del zurdo, que hoy buscará el doblete ante Báez.