Alexis Sánchez es uno de los jugadores de la Selección que más utiliza las redes sociales. Lo hace para mostrar su entrenamientos, su condición física, celebrar los triunfos en la Selección y en el Arsenal y hasta para revelar noticias relacionadas con su vida privada. Sin embargo, extrañamente, después de la eliminación de Chile del Mundial de Rusia, el tocopillano prefiere el silencio. No tomar el computador ni la tablet. En definitiva, no referirse al fracaso del equipo de Juan Antonio Pizzi.
La conducta del delantero parece extraña. Sobre todo cuando sus compañeros, en su mayoría, han salido a dar la cara. Lo hicieron Charles Aránguiz y Gary Medel apenas finalizó el encuentro. Lo mismo el capitán Claudio Bravo, incluso con el agregado de que su esposa, Carla Pardo puede desatar un conflicto de proporciones después de revelar indisciplina en el combinado. Y también se refirió a la decepción de quedar fuera del Mundial Marcelo Díaz, quien quedó marginado de la última convocatoria.
El Niño Maravilla calla. A diferencia de otras ocasiones, como en la Copa América de 2015 cuando, después del accidente automovilístico que protagonizó Arturo Vidal, escribió un mensaje de apoyo a su compañero y aclaró, en conferencia de prensa, que era él quien administraba sus perfiles públicos. E incluso a diferencia de los mensajes motivacionales que fue publicando en la antesala del partido frente a Brasil.
Su última aparición en las redes sociales se produjo hace tres días, cuando mostró una fotografía en la que aparece posando con Marcelo Salas. Después de ella, ni rastros. Sánchez prefiere callar.