Pablo Longoria saluda en francés, agradece el apoyo. El presidente del Olympique de Marsella habla del currículo de Alexis Sánchez, la estrella a la que le corresponde presentar. Destaca su experiencia internacional y en la Selección, de su valor individual. Habla de un jugador muy competitivo. Sus palabras reflejan el entusiasmo que genera el arribo del Niño Maravilla. “Gracias por cumplir tu palabra, por creer en el proyecto. En el proyecto necesitamos desarrollar jugadores, darle valor, que pueda jugar en varios puestos. Esto es lo que queríamos, darle un impacto al equipo. Y no solo el palmarés. Encarna lo que queremos. Subir el equipo, cambiarlo de dimensión. Estamos muy felices”, ensalza al Niño Maravilla. El Olympique de Marsella está feliz de recibirlo.

Sánchez escucha, se toma el rostro y el cuello. El primer saludo de la prensa es en italiano. “Grazie”, responde. Le preguntan por la acogida de los hinchas. Cómo la ha vivido y cómo está físicamente. “Lo de la afición me sorprendió. Aman a este club. En lo físico me he estado entrenando en Milán. Me falta tener más contacto con el balón, ajustar algunos detalles, pero físicamente me encuentro bien”, contesta.

Luego debe responder acerca de la polifuncionalidad que ofrece. “He jugado de nueve, por izquierda, por la derecha, detrás del nueve. Me puedo adaptar a cualquier posición. Lo he aprendido durante mi carrera”, sostiene el chileno.

Consultado respecto de lo que conocía de su nuevo club, sostiene: “Me han comentado que es un equipo que tiene mucha historia, el más grande de Francia, que es el único que ha ganado la Champions. No ha sido campeón hace diez años y es un reto para mí, porque quiero ganar. He jugado con alguno en el Arsenal. No los conozco mucho, mucho, pero espero hacerlo ahora que los veré todos los días”.

También le contesta a un medio chileno respecto de una eventual referencia de Mauricio Isla, su amigo, quien pasó por el club. “No he hablado con Isla, pero me comentó hace tiempo que le había gustado la ciudad y el equipo. Aún no he tenido un rato tranquilo, pero lo único que quiero es jugar”, dice.

Alexis Sánchez en su llegada a Francia. Foto: @olympiquedemarseille/Instagram.

Objetivos y presión

Jugar Champions es algo lindo para todo jugador. Competir en lo mío. En todos lados gané títulos. Vengo a ganar algo. Fui al Inter que no ganaba hace tiempo y aquí también. El grupo es bueno, el entrenador y la dirigencia también. La idea mía es ganar algo acá”, insiste respecto de los objetivos que se planteó al elegir al equipo francés.

Sánchez es requerido por la rivalidad con el PSG de Lionel Messi y Neymar y por la competitividad y el estilo del fútbol francés, pero termina realizando una reflexión ajena, pero intensa. Habla, también, con propiedad y pertenencia de su nueva escuadra. “El recibimiento de ayer fue algo lindo. En todas partes me han recibido bien. Como dice el dicho, uno nunca es ídolo en su país. Me siento muy querido en el extranjero. Son cosas lindas que te llegan en el momento en que menos se espera. Eso hace dimensionarlo. De la liga, vi que el equipo es intenso. Presionamos alto. Me gusta el estilo, cómo presionamos. Ganar 4-1 es algo lindo”.

Al tocopillano le recuerdan los pasos de Marcelo Bielsa y Jorge Sampaoli por el club y si ha podido hablar con ellos. “No he podido hablar con ellos, pero como los conozco, son dos entrenadores impresionantes, que se dedican a su trabajo al cien por ciento. Siempre quieren ganar. Bielsa te enseña sus entrenamientos, Sampaoli la presión. En la Copa América nos enseñó mucho también”, recuerda.

Venir aquí es un desafío personal. Jugué en Italia, España e Inglaterra. En el Inter estaba Agoumé y me decía que el Marsella era el ‘uno’ de Francia. Me llamó la atención y dije ‘por qué no’. Venir aquí es un reto. Y con el equipo haremos todo lo posible para conseguir triunfos”, insiste respecto de las razones que fundamentan su elección.

Me encanta la competencia. Somos un equipo y debemos remar todos para el mismo lugar. Quiero mejorar. Y todos debemos querer lo mismo”, apunta respecto de la disputa por un puesto.

Luego le preguntan por la adaptación. “Lo primero es buscar casa, de estar bien cómodo. Luego, hay que enfocarse en lo deportivo, en entrenar bien, en la alimentación. Para pensar en un trofeo hay que estar bien, feliz, con tu familia y con tus perros”, sostiene.

Me gusta la presión, que las cosas sean difíciles para yo hacerlas fáciles. La presión me ha acompañado en toda mi carrera. Estar en el Barcelona, el Arsenal o el Manchester United te enseña a eso. A convivir con la presión”, apunta respecto de las exigencias y expectativas que tendrá sobre él.

Sigue en El Deportivo