Alexis Sánchez le da ilusión al Marsella: anota el gol de la victoria para quedar a cinco puntos del PSG

Hay liga en Francia. El Olympique de Marsella logró un triunfo clave para seguir con aspiraciones altas. En el cierre de la jornada dominical de la fecha 33 de la Ligue 1, el cuadro olímpico recibió al Auxerre, que está en la parte baja de la tabla, y logró remontar el marcador para imponerse 2-1. Alexis Sánchez fue titular y certificó la victoria anotando el gol que alimenta la ilusión del club.

Si bien el gran candidato para quedarse con el título es el París Saint-Germain, puntero de la competencia, tropezó feo con el Lorient (perdió 1-3 en el Parque de los Príncipes y terminó con 10 por la expulsión de Achraf Hakimi) y le abrió la puerta a sus perseguidores de acercarse. Es el caso del Marsella, que si ganaba su compromiso iba a quedar a cinco puntos de los parisinos. Por lo mismo, no podían fallar en el Stade Velodrome.

El técnico Igor Tudor no modifica su diseño táctico: el 3-4-2-1. Uno de los cambios es la posición de Alexis. El tocopillano dejó su puesto de centrodelantero, el cual utilizó gran parte de la temporada, para jugar más atrás, en la línea de enlaces detrás del 9. La referencia de área, en este juego, fue el portugués Vitinha.

El primer tiempo tuvo al OM como el dominador del balón, creándose algunas situaciones para abrir la cuenta. Durante los 45 minutos iniciales registraron el 75% de posesión, pero con cero remates a portería. Se trataba de intentos algo esporádicos. En los 12′, un cabezazo de Vitinha se fue desviado. Luego, en los 15′, una combinación del luso con Sánchez acabó con un remate del 9 que se fue lejos. El tocopillano contó con una. En los 19′, tras un córner, cabecea y la pelota termina en la parte lateral del arco. Nada muy claro del local.

Por la disposición defensiva del Auxerre, fue sorpresa que la visita diera con el gol. En los 33′, Birama Touré hace un golazo para darle la ventaja a su escuadra. Saca un gran remate desde fuera del área tras un despeje del arquero Pau López en un tiro libre. Ese 1-0 le causaba mucha gracia a Mbappé, Messi y compañía.

El Marsella afrontó el complemento contra un rival que acentuó fuertemente su faceta defensiva y también contra el tiempo, porque no encontraba las respuestas para penetrar la muralla que armó el visitante. Los de Tudor se dispusieron más arriba en la cancha, dejando espacios atrás, exponiéndose a cualquier contragolpe. El ingreso de Nuno Tavares le dio algo más de profundidad por la franja izquierda. El mismo lateral-volante contó con una opción en los 55′, sacando un remate con la diestra que se desvía en un defensa y da en un poste.

Mientras tanto, Alexis Sánchez se estacionaba en el área, aguardando por algún balón filtrado. No entraba mucho en el circuito del equipo, que se concentraba en triangulaciones por la banda derecha. En los 68′, desvió un cabezazo. Los chilenismos que lanzó tras la acción eran reflejo de la frustración. Al OM se le escapaba una chance de oro para respirarle en la nuca al PSG. Hacia la parte final, Tudor mandó al campo a Guendouzi y a Payet. Como salió Vitinha, Sánchez volvió a ser el 9, ubicándose entre los centrales. Las modificaciones resultaron.

Todo lo que no había logrado el Olympique durante el partido, lo hizo en un par de minutos. Una ráfaga de eficacia les permitió remontar un encuentro áspero. En los 75′, llegó el 1-1 del turco Ünder, con un tiro cruzado con la derecha (su pierna menos hábil). Y dos minutos más tarde, apareció el Niño Maravilla. Guendouzi pone un notable pase filtrado, para que Sánchez vaya al espacio y quede frente a frente con el arquero rival. El seleccionado chileno remata por bajo y concreta el 2-1. Estalló el Velodrome, porque el triunfo era fundamental para mantener la ilusión. El ex Inter llegó a 13 tantos con la camiseta del OM en la liga.

El club más popular de Francia alcanzó los 70 puntos, a cinco del líder, ambos con 33 partidos jugados. Restan 15 unidades por disputar. Si bien es difícil la tarea, la esperanza está viva en el Olympique de Marsella, lo que hasta hace algunas jornadas atrás parecía una quimera.