El sábado 12 de junio, Chile alistaba los últimos detalles para el viaje a Brasil. Sin embargo, la delegación de la Roja tendría un pasajero menos. Una baja crucial, por lo demás. En Santiago se quedaba Alexis Sánchez. La ANFP comunicaba que el Niño Maravilla padecía una lesión muscular. “El jugador Alexis Sánchez. tras el entrenamiento de ayer presentó una lesión muscular de plantar delgado”, informaba la entidad. “El tiempo de recuperación estimado supera la primera fase de la Copa América 2021, por lo cual el deportista permanecerá su proceso de recuperación en Chile, con el cuerpo médico de la selección”, detallaba respecto de los próximos pasos que daría el delantero del Inter de Milán, quien fue inscrito con la camiseta número 10 por petición del mismo delantero, un guiño a su condición de figura o una pista respecto de la nueva función que adoptaría en la cancha. Un mazazo duro que obligaba a una rápida reacción, con decisiones enérgicas incluidas. Una lesión que provocó la impotencia del futbolista, quien no podía creer que se lesionara en la previa al certamen. Desde la Selección cuentan que el futbolista al momento de sentir el dolor pegó un grito que se escuchó a varios metros de distancia, como asumiendo el difícil panoramaba que se venía por delante.
Sánchez y el cuerpo médico de la Roja apostaban a realizar la recuperación en en la casa del delantero, con supervisión diaria del staff de la Selección, con la esperanza de llegar en condiciones a la segunda fase del certamen, si el equipo de Martín Lasarte consigue la clasificación. A su cargo quedó Fernando Radice, uno de los médicos de la Roja y uno de los especialistas en medicina deportiva más reputados en el país. A su disposición, también, quedó toda la tecnología posible. El tocopillano apura su rehabilitación mediante el uso de una cámara hiperbárica, instalada en su domicilio, un tratamiento que suele ocuparse en el deporte de alto rendimiento para acelerar la cicatrización de tejidos dañados. Igualmente, corre contra el tiempo.
Pese al esfuerzo del tocopillano, el delantero no podrá llegar a los cuartos de final del certamen. En semifinales recién podría pensarse en su participación, aseguran desde la Selección. El jugador del Inter de Milán aún sigue realizando trabajos de recuperación, sin poder realizar ejercicios en el campo de juego. Se examina continuamente en la Clínica Meds.
Este lunes, AS7 subió videos a su cuenta de instagram Se filmó en una piscina realizando ejercicios de recuperación.
Otro de los puntos que le da vuelta a Lasarte es la posibilidad de exponerlo de manera innecesaria. Más allá de las ganas del futbolista de querer disputar la Copa América, en el cuerpo técnico se asume que llevarlo a Brasil podría ser riesgoso pensando en que en pocas semanas se jugará por las Eliminatorias. El desafío Qatar 2022 es prioridad.
El riesgo es el dolor
Los especialistas avalan la estrategia. Aseguran que si el plan no sufre contratiempos, Sánchez llegará en condiciones para jugar desde los cuartos de final en adelante. Y que, además, no correrá mayores riesgos. “El plantar delgado es como el apéndice. No tiene función alguna. En algunas cirugías lo vamos a buscar, para sacarlo y usarlo como injerto”, explica el traumatólogo Alejandro Orizola, de amplia experiencia en el cuerpo médico de Universidad de Chile, entre otros.
El problema radica, más que en la funcionalidad, en las molestias que provoca una lesión de este tipo. “Si se desgarra, genera un cuadro inflamatorio y de dolor. El tratamiento que se aplica en estos casos va enfocado a manejarlos. La cámara hiperbárica aumenta el contenido de oxígeno en los tejidos, por lo que optimiza los procesos metabólicos. El tratamiento funciona”, explica el facultativo.
Según Orizola, los plazos permiten albergar esperanza de contar con Sánchez para la segunda ronda del torneo. “Podría llegar, porque, como dije, no debería tener problemas funcionales, pero es muy personal forma en que se enfrenta a la inflamación o dolor. La lesión no se va a agravar. Ese tendón ya está roto. No tiene comprometidas otras estructuras”, diagnostica. Sin embargo, finalmente, lanza una advertencia: “Todo es teoría”.