Inter de Milán demuestra largamente que no tiene rivales en Italia. En la semifinal de la Supercopa de Italia, minitorneo que se disputa en Arabia Saudita, la squadra nerozzurra no tuvo mayores complicaciones para derrotar 3-0 a la Lazio.

Un resultado más que mezquino para el derroche de los lombardos, en un partido donde el chileno Alexis Sánchez ingresó en el minuto 74 e inició el tercer gol de su equipo.

El lunes, el equipo lombardo definirá el título ante Napoli, el que sería el cuarto del Niño Maravilla con esta camiseta y el décimo quinto en sus 16 temporadas en el fútbol europeo.

Porque el cuadro lombardo de ninguna manera salió a especular con un resultado. Se plantó bien arriba en el campo del cuadro romano e intentó abrir la cancha en todo momento, por los dos costados.

Prueba de ello fue la supremacía que alcanzó en el primer cuarto de hora del partido, periodo en el que se generó al menos cuatro ocasiones claras de anotar. La más importante, un cabezazo de Marcus Thuram que salió por muy poco al córner.

En esa dinámica el gol lombardo estaba al caer y así también lo demostraron los jugadores. A los 17 minutos, un centro desde la izquierda de Alessandro Bastoni fue desviado con el taco por Federico Dimarco, quien habilitó de manera precisa a Thuram para el 1-0.

Lejos de bajar la intensidad, los dirigidos de Simone Inzaghi fueron por más. Disparos consecutivos del mismo Dimarco y de Matteo Darmian volvieron a poner en aprietos a los romanos.

A los 34′, un largo remate de Lautaro Martínez complicó al meta lacial Ivan Provedel, quien finalmente logró sacar la pelota con la punta de los dedos, ante la llegada de Thuram.

A esa altura, lo del equipo del tocopillano era un verdadero despilfarro, ante un elenco capitalino que apenas pudo contrarrestar el poderío de su adversario con un pobre remate desviado.

A los 35 minutos, Inter volvió a acercarse con peligro. Ahora fue una volea de Nicoló Barella la que se estrelló en el ángulo ante la incredulidad del talentoso mediocampista de la Azzurra.

En el final de la primera parte, Darmian se encontró solo en el área con el balón a su antojo, pero no pudo darle dirección para vencer al meta Provedel, quien sufrió mucho en 45 minutos iniciales.

Va por más

El comienzo de la segunda parte siguió el mismo relato. A los 47 minutos un golpe del español Pedro provocó la caída de Lautaro Martínez en el área. Y aunque el árbitro Matteo Marchetti no advirtió la presunta falta, revisó la imagen a instancias del VAR y cobró el penal.

El perfecto lanzamiento del turco Hakan Calhanoglu no le dio oportunidad al meta biancoceleste, quien remató fuerte al rincón diestro del golero para el 2-0. Así, el euroasiático sumó la docena de goles en igual cantidad de penas máximas.

Pero los lombardos, ahí, tampoco aflojaron. En la jugada siguiente, Martínez estuvo muy cerca de marcar el tercero, pero su remate dio en pleno horizontal.

El cuadro que dirige Maurizio Sarri intentó detener el torbellino interista, pero se quedó sin ideas para llegar al gol. Encima, los espacios que dejaba en la retaguardia eran constantemente aprovechados por su adversario.

Lautaro volvió a intentar, pero su remate pasó rozando el vertical derecho de la portería lacial. A los 74 minutos, el técnico Simone Inzaghi decidió dar un descanso a sus delanteros titulares.

Momentos cruciales que el chileno Alexis Sánchez aprovechó al máximo. Administró bien la pelota, hizo jugar a sus compañeros y mostró personalidad.

Así generó el tercer gol de su escuadra, después de concebir un contragolpe letal que Davide Frattesi convirtió en el tercer gol, a tres minutos del final del tiempo reglamentario.

Un partido redondo en el que la escuadra lombarda sacó una diferencia importante, que resultó hasta egoísta por la inmensa superioridad del equipo de Alexis Sánchez y compañía.

El Deportivo