El Manchester City de Pep Guardiola demuestra cada semana que en esta temporada habla en serio. Se erige como candidato en cada competencia que tiene. Aquello lo conoció de cerca el Arsenal, que no pudo ante un cuadro tan contundente como paciente. Los celestes ganaron por 3-1, con la presencia de Alexis Sánchez en la cancha todo el cotejo.

Finalmente el tocopillano desembarcó en el Etihad Stadium, pero con la camiseta de los cañoneros. Se esperaba que fuera un duelo especial para Sánchez, considerando su fallido traspaso a Manchester en el cierre del libro de pases europeo, el 31 de agosto. "No tengo ninguna duda sobre Alexis. Cuando entra a una cancha siempre quiere ganar y no veo por qué debe ser diferente ante Manchester City", dijo Arsene Wenger en la previa, aplacando el morbo por el factor Alexis.

Luego de que el DT guardara a su mejor contingente en el partido ante Estrella Roja, por la Europa League, el club de Londres presentó un cambio de esquema. Wenger se olvidó del 3-4-2-1 para volver a la línea de cuatro en el fondo (a veces fue de cinco), poblar el mediocampo y dejar como único punta a Sánchez. En la banca, esperaban su oportunidad Lacazette y Giroud.

El planteo inicial del Arsenal complicó al City. El puntero de la liga estaba incómodo con la presión visitante. Pero todo cambió gracias a Kevin De Bruyne. Uno de los mejores jugadores de la Premier abrió la cuenta en los 19', con un zurdazo cruzado.

El 1-0 le permitió al City tomar el control, mientras el Arsenal se nubló, con un Alexis poco participativo y muy solo en ofensiva. Como no entraba en sintonía, se le notaba ofuscado. Por lo mismo, hizo varias faltas.

Como para ahondar más la situación del Arsenal, en el inicio del segundo tiempo se sanciona un penal a favor del City, por falta de Monreal sobre Sterling. Sergio Agüero marcó el 2-0 (50'), el tanto 179 en su historia ciudadana.

Wenger decidió ser más audaz y mandó a la cancha a Alexandre Lacazette, sacando a un volante de corte (Coquelin). En los 65', el ex Lyon responde y anota el 2-1, con un remate que pasa entre las piernas de Ederson. Con la presencia de un 9, Alexis se fue a la banda izquierda, para tratar de abrir la cancha y complicar a Walker, aunque no lo consiguió demasiado. El ex Cobreloa no estaba cómodo, tanto así que fue amonestado en el complemento por una infracción sobre Silva. El chileno no desequilibró. No fue determinante.

Con el descuento el partido ganó en emoción, aunque el City volvió a golpear, con ayuda. En los 74', Gabriel Jesús hizo el 3-1, gol que debió ser anulado por una evidente posición de adelanto de David Silva, quien asistió al brasileño. Ahí el juego se murió.

De esta manera, el equipo de Guardiola se afianza como el puntero de la Premier con 31 puntos, en el mejor arranque de un equipo en la primera división inglesa al cabo de 11 fechas. Le sacaron 12 unidades al Arsenal, que otra vez mira la vanguardia como una montaña empinada.