Un mal momento pasó la familia de Álvaro Ramos, tal como lo dejó en manifiesto el jugador a través de sus redes sociales, tras denunciar un violento asalto que sufrió su familia en Alto Hospicio.

Se metieron a robar y tenían secuestrada a mi familia en Alto Hospicio. Gracias a Dios ahora están bien”, comenzó relatando el iquiqueño en un mensaje que puso en las historias de su cuenta de Instagram.

Fueron extranjeros por su acento”, denunció. “Nos tienen la cagada en la Primera Región y siguen entrando más y más delincuentes. Hagan Algo”, complementó.

Luego, subió otra historia en la que se ve una pistola. “Gracias por dejar pasara todos los extranjeros sin documentos”, ironizó.

Más tarde, detalló que “a las 6 de la mañana me llama una hermana diciendo que se habían metido en un terreno que tenemos donde está viviendo mi madre y un primo, y donde va a vivir toda mi familia”, dio a conocer al programa Contigo de Chilevisón.

Se metieron tres extranjeros con pistolas desarmando todo buscando dinero. Tenían amarrada a mi mamá, y mi hermana solo alcanzó a escuchar que los extranjeros estaban pidiéndole dinero, así que fueron mis cuñados, mis dos hermanas y los tenían ahí amarrados y alcanzó uno a correr para llamar a Carabineros. Y después le pegaron a mi cuñado con la pistola en la cabeza. Es una pesadilla despertar con un llamado así. Está terrible la cosa en Iquique”, continuó relatando Ramos.

Yo me imaginé lo peor, que había fallecido alguien. Me salieron lágrimas desde el primer minuto porque estaba desesperado. Gracias a Dios no pasó a mayores”, confesó.

Luego indicó que a sus familiares “los tuvieron amarrados en la casa por una hora. Mi cuñado fue a buscar a carabineros y en el momento en que llegaron ellos iban saliendo y empezaron a arrancar corriendo. Ahí dejaron el auto cargado con las cosas. No alcanzaron a robarse todo”.

Esperamos que se haga justicia, no solo por mi familia, sino por todos los iquiqueños que están pasando por esto. Hay muchos asaltos”, agregó. Además, en la transmisión indicó que la policía había logrado dar con los delincuentes.

Por lo complicado del momento, Ramos agregó que “he pensado en dejar por el momento la ciudad e irme a vivir a Santiago o a Coquimbo con mi familia. Muchos dicen que en Iquique están maltratando a los inmigrantes, pero no están viviendo en la ciudad. No ven el miedo que tiene la gente. No tengo nada contra los inmigrantes. Pueden venir a trabajar a hacer su vida, pero no los delincuentes. Muchos delincuentes están entrando y eso está arruinando la ciudad”, cerró.

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