Ángelo Henríquez, este domingo, recibió una oportunidad de esas que, en su situación, podía ser la última. En el clásico universitario, Hernán Caputto, por sobre Nicolás Guerra y Marcos Riquelme, prefirió darle la camiseta de titular a Gohan, quien tuvo su último partido desde el arranque, el 8 de junio de este año, ante Rangers por Copa Chile, con Alfredo Arias en la banca.
Entró motivado y activo desde el inicio. Las peleó todas. Buscó, intentó, pero la chance no llegaba. Eso hasta el minuto 68, cuando en el Estadio Nacional abundaba la desesperación, y solo un gol rápido metía a los azules en la disputa de los tres puntos.
Aveldaño recibió, pero no controló, dejando un balón suelto en el área cruzada. Ahí llegó el esperado momento de Henríquez, ese que imaginó tantas veces mirando el partido desde la banca o la zona de calentamiento. Corrió y empujó la pelota a la red del arco defendido por Dituro, quien no tuvo muchas chances de contener el tiro.
La euforia se desató. El grito de Gohan salió desde el fondo. Nadie le había creído. Kudelka y Arias no confiaron, mientras que Caputto, en su tercer partido en la banca, sí lo hizo. El DT lo celebró como un hincha más.
En el 81', su desgaste físico fue notado por el técnico, quien lo reemplazó por Riquelme. Sin quejarse por el cambio, se retiró de la cancha saludando a la hinchada, que lo ovacionó, mientras que el ex Audax Italiano, que hacía ingreso, fue pifiado por gran parte de los presentes en el estadio.
Con tranquilidad
Pese a que el gol marcado le funciona perfecto como respuesta a los técnicos que apenas lo consideraron como opción, Henríquez prefiere la discreción. Fue un lindo día y no lo quiere ensuciar. Para él, su lucha interna fue la que lo sacó del hoyo en el que estaba. "No quiero hablar de otros entrenadores. Siento que me he mantenido trabajando, me he sacrificado toda la semana entrenando. Solo estoy feliz de poder aportar con algo para ayudar al equipo. Prefiero decir que es el convencimiento que tenía conmigo mismo, de no sentir las críticas, no escuchar, seguir trabajando, intentando mejorar y demostrarme a mí mismo que soy capaz de jugar bien", comenta el delantero a La Tercera.
Cuando se le dice que pasó de ser la última opción a la primera en el ataque de la U, se lo toma con humildad. Prefiere respetar a sus compañeros, que, según él, también están a la altura. "No sé si pasé a ser el primero. Los delanteros que hay trabajan muy bien, son sacrificados. Es una difícil competencia porque todos quieren jugar, por algo están en la U. Hay que estar al mejor nivel siempre, no solo para jugar el fin de semana sino para aportar al equipo. Todos los delanteros tienen cosas positivas de las que uno puede aprender. Admiro a muchos jugadores del plantel", dijo.
"Todos tienen la posibilidad de ganar minutos. Tanto Leandro (Benegas) y Ángelo tuvieron un partido acertado. Me alegro por ellos", comentó por su parte Caputto, orgulloso por el rendimiento de los atacantes escogidos.
La aparición de Gohan en los clásicos ya no es novedad. Los archirrivales son sus víctimas favoritas, y ahora, se ilusiona con anotarle a Colo Colo. "Claro que quiero marcarle jaja, ojalá poder tener un buen resultado en ese partido", cierra.