Aránguiz da otro recital de buen fútbol y Vargas sigue sin aportar con goles: el 1x1 de Chile contra Bolivia

Claudio Bravo: A diferencia del partido contra Argentina, Bravo no fue exigido en San Carlos de Apoquindo. Era una noche tranquila para el capitán hasta el penal de Maripán. Ante Moreno Martins nada pudo hacer el portero del Betis.

Francisco Sierralta: El defensor del Watford tuvo una buena actuación en la línea de tres constituida por Martín Lasarte. Se ubicó por la derecha y mostró seguridad con el balón. Tuvo la apertura de la cuenta en el primer tiempo, cuando su arremetida en área chica mandó la pelota al travesaño. Era un gol cantado que falló el zaguero.

Gary Medel: Una doble fecha perfecta para el Pitbull. Esta noche fue tranquila en cuanto a la exigencia defensiva, mucho más relajada, pero Medel jamás se confió. Contuvo de gran manera la presencia de Moreno Martins.

Guillermo Maripán: Parecía que se redimía de las dudas sembradas ante Argentina. Sólido en la marca, agudo en la velocidad de anticipo, tranquilo con la tenencia del balón. Todo estaba perfecto. Hasta que su mano izquierda tocó la pelota dentro del área en una jugada que no revestía peligro alguno. Eber Aquino revisó en el VAR y no dudó: otro penal contra Chile, otra vez provocado por Maripán.

Mauricio Isla: Ubicado en el sector derecho del mediocampo, subió de forma incansable por aquel lateral. Casi como un extremo más, estuvo constantemente apoyando las labores de ataque, presentándose así mismo como una opción más de gol. En varias ocasiones alcanzó línea de fondo.

Erick Pulgar: Tomó el protagonismo que le faltó en Argentina. Propiciado por el planteamiento boliviano, Pulgar pidió la pelota, la movió, tuvo recorrido e hizo gala de su gran arma: el disparo desde media distancia. En su cabeza estuvo la llave para abrir tan cerrada defensa: se aventuró en un terreno que no domina y saltó de gran forma ante la salida de Lampe. Un golazo que premió su actitud en San Carlos de Apoquindo. Sólida actuación del jugador de la Fiorentina, quien además supo cubrir las subidas de los altiplánicos en el segundo tiempo.

Charles Aránguiz: Un recital del Príncipe. Hizo todo bien. Desarrolló su fútbol por todos los frentes del ataque. Liberado de la responsabilidad de marcar, Chile se movió según sus tiempos y condiciones. Brilló en la primera mitad, pero fue en la segunda mitad cuando resolvió todos los problemas chilenos con un pase magistral a la cabeza a Pulgar.

Eugenio Mena: Otra brillante actuación del Chueco. Se devoró la banda izquierda. El planteamiento táctico de Chile le permitió adelantarse y participar activamente en el ataque, donde profundizó y envió peligrosos centros al área que casi suben al marcador. En el retroceso también estuvo sobresaliente, como en sus mejores tiempos.

Alexis Sánchez: El Niño Maravilla estuvo más impreciso que de costumbre. Abandonó el sector derecho y se retrasó en demasía, casi al nivel de Charles Aránguiz. Necesario desde un punto de vista táctico dado lo cerrado de la defensa de Bolivia. Sin embargo, su influencia no fue la esperada e incluso perdió varias pelotas en el centro del campo. Tuvo el gol en el primer tiempo, pero le robaron la celebración en la línea. En partidos como estos debía aparecer la magia del distinto, pero la de Alexis simplemente no llegó a la precordillera.

Eduardo Vargas: Comprometido, participativo... y peleado con el arco. Se valora el compromiso de Vargas con el juego, pero su presencia en este equipo está supeditada a los goles. Y Vargas simplemente no los está convirtiendo. Tuvo la apertura de la cuenta en el primer tiempo, pero el remate se fue al palo. Ha jugado cuatro partidos durante esta Eliminatoria y no ha convertido ningún gol. Fue reemplazado a los 65′ por Luis Jiménez.

Jean Meneses: Excelente partido del extremo izquierdo. Se sacudió de la timidez que mostró ante Argentina y tomó el protagonismo que requería un partido así, frente a una selección tan cerrada defensivamente. Se impuso gracias a su gran recorrido físico puesto que le permitió estar presente en todos los sectores de la cancha.

Luis Jiménez: Ingresó a los 65′ por Eduardo Vargas, pero no logró ser la carta de gol que Chile necesitaba. Tuvo un remate potente a las manos de Lampe cuando la Roja desesperaba por el 2-1.

Felipe Mora: Ingresó a los 86′ por Jean Meneses.

Fabián Orellana: Ingresó a los 86′ por Francisco Sierralta.