Aránguiz se distancia de Bravo: "Era mejor que estuviéramos todos para hablar del fracaso del Mundial y así poder comenzar de cero"
El volante insistió en sus críticas al arquero y dijo que su retorno depende exclusivamente del entrenador. "Soy jugador y no puedo opinar de quién tiene que estar. A mí, si me llaman, voy", dijo.
La marginación de Claudio Bravo del inicio del proceso de Reinaldo Rueda al frente de la Selección Nacional trastocó el ánimo al interior del camarín. Los problemas del arquero suplente del Manchester City con Arturo Vidal, además de las exigencias con las que condicionó su nominación, no cayeron bien en el seno del grupo que comandó a la Roja a su etapa más gloriosa.
Hasta ahora, de hecho, escasean las muestras de apoyo público al meta nacido en Viluco y, por el contrario, el plantel comienza a tomar distancia. Es el caso, por ejemplo, de Charles Aránguiz, que este lunes llegó a Chile para iniciar sus vacaciones y volvió a referirse al tema. "Yo sigo pensando en lo que él dijo. Si tenía planes con su familia, es respetable. Yo lo vi por el tema de que era el primer partido de un nuevo proceso y era mejor que estuviéramos todos para hablar del fracaso del Mundial y así poder comenzar de cero", aseguró el Príncipe. "Seguir hablando de eso no le hace bien a nadie. Lo que dije, lo sigo sosteniendo", matizó, en diálogo con el CDF.
Sobre si el camarín está abierto al retorno de Bravo, el mediocampista fue enfático. "Yo soy jugador no más. No puedo opinar de quién tiene que estar. A mí, si me llaman, voy", puntualizó.
En tanto, respecto de la exigencia del ex Real Sociedad de contratar a Julio Rodríguez como preparador de porteros, el volante del Bayer Leverkusen aseguró: "Yo no soy arquero, así que no sé cuál es la preparación adecuada. Pero hay un entrenador y él decide si hace un cuerpo técnico con tales o tales personas".
Finalmente, se refirió a la decisión del adiestrador colombiano de la Roja de utilizar únicamente a jugadores que actúan en Chile, México y Argentina en el microciclo que se inicia hoy con miras a los amistosos ante Rumania, Serbia y Polonia. "Hace poco hablé con él y me dijo. Yo pensé que íbamos a ir a jugar, pero hay que respetar lo que plantea. Y creo que nos viene bien. Somos seis u ocho jugadores que no tenemos vacaciones largas hace rato y es bueno verlo por ese lado. Voy a aprovechar a los amigos y la familia", cerró, antes de afirmar que ha pasado "muy poco tiempo" como para hacer balances del trabajo de Rueda como jefe técnico del equipo nacional.
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