“Nos cagaron... qué más puedo decir”, declaraba el arquero de Unión Española Sebastián Pérez, una vez finalizado el compromiso entre Everton y los hispanos, en Sausalito. Los de Independencia cayeron por la mínima en una jugada en la que se validó un lanzamiento penal que dio en los dos pies del jugador Juan Cuevas, algo que no permite el reglamento. Este lunes, Roberto Tobar, jefe de los árbitros en Chile, anunció un castigo de cuatro fechas para Cristian Garay, el juez del compromiso en Viña del Mar. Sin embargo, este lunes los fallos escandalosos continuaron, claro que en la Primera B.
Bajo el arbitraje de José Cabero, Deportes Santa Cruz recibió a la Universidad de Concepción por la fecha 19 del certamen, en el Estadio Municipal Joaquín Muñoz García, en un compromiso de equipos necesitados que pelean en la parte baja de la tabla.
Al minuto 87, ambos elencos igualaban 1-1. Tras un tiro de esquina para el Campanil, el jugador local Eduardo Vilches cometió un evidente penal al cortar la trayectoria del balón con la mano, simulando que le había dado en el pecho. Sin embargo, y pese los reclamos de los futbolistas visitantes, Cabero dejó seguir el juego y no cobró la pena máxima.
Minutos después, la transmisión oficial del encuentro repitió la jugada. Las imágenes, al igual que el fin de semana, dejaron completamente expuesto al juez ante el evidente penal no sancionado. La acción pudo significar el gol del triunfo para una complicada Universidad de Concepción.
Cabe mencionar que en la Primera B no hay VAR. José Cabero es un árbitro con experiencia, quien actualmente se desempeña la mayoría de las ocasiones en Primera División. Lamentablemente, en esta jornada hizo noticia por su mal desempeño.