Este jueves, Paulo Díaz cumplió un significativo trámite: juró ante la bandera de Argentina, en el marco de la obtención de la nacionalidad transandina. El acto es, por un lado, administrativo y está relacionado directamente con su carrera futbolística. Por otro, sin embargo, es también una muestra de gratitud hacia un país que, con una leve interrupción, le ha acogido durante una década y en el que formó su familia.
Una decisión que defiende Ítalo Díaz, padre del zaguero, quien sostiene que esto no afecta en nada a la Roja. “Argentina le abrió las puertas. El ama a River. Mi nieto, Agustín, también. La familia es toda de River. Ya lleva cinco años. Le quedan tres años y medio más de contrato”, explica el exdefensa a El Deportivo.
“No hay nada que cuestionar. El hincha argentino lo posiciona allá arriba y él siempre ha tenido los pies sobre la tierra. Debe ser uno de los extranjeros con más partidos en la historia de River. Y ahora se nacionaliza para abrirle un cupo al club”, profundiza el exseleccionado nacional.
De esta forma, Paulo Díaz cumple un objetivo que buscaba hace tiempo: liberarle un cupo de extranjero a River Plate, que busca en el exterior una carta para reforzar el mediocampo. En ese sentido, toma fuerza la idea de que el español Iker Muniain, quien dejó el Athletic de Bilbao, pueda cumplir su sueño de defender a los Millonarios. Las puertas están, formalmente, abiertas. Matías Patanian, vicepresidente de River, viajó especialmente a convencerle.
¿Le afecta a la Roja?
Paulo Díaz no es solo una de las figuras del equipo de la banda sangre, a tal punto de que el club le ofreció el contrato más alto del fútbol argentino para impedir que aceptara una propuesta de la liga de Arabia Saudita. También forma parte de la Selección y está llamado a convertirse en uno de los puntales del proceso de Ricardo Gareca, a las puertas del reinicio de las Eliminatorias.
En la Copa América, fue titular en los encuentros frente a Perú y Argentina. Sorpresivamente, pese a no presentar dificultad física alguna, Ricardo Gareca le excluyó del decisivo encuentro frente a Canadá. La explicación extraoficial para la decisión del Tigre radica en que el defensor intercambió su camiseta con Lionel Messi, una conducta que no le gustó al estratega.
Sin embargo, es un hecho que para septiembre, cuando se retoma la disputa de los cupos para el Mundial que organizarán conjuntamente México, Estados Unidos y Canadá las diferencias estarán resueltas. También es un hecho que Díaz seguirá defendiendo la camiseta roja.
Argentino, pero...
Paulo Díaz tendrá doble pasaporte, pero no podrá defender a la selección argentina. La reglamentación actual es suficientemente clara en ese sentido, a diferencia de lo que acontecía en el siglo pasado, cuando hubo varios casos de doble militancia. Hubo uno especialmente insigne. Alfredo Di Stefano se puso tres casaquillas. La Saeta Rubia jugó por Argentina, su país natal; por Colombia y por España, donde se consagró.
En efecto, la reglamentación permite defender a una selección de una nacionalidad a nivel adulto después de haber jugado por otra en el plano formativo. Ese aspecto fue regulado en 2004. Esa vez se estableció el límite para elegir el combinado definitivo: cuando se cumplen los 21 años.
Por cierto, en los planes de Díaz jamás ha estado defender a la Albiceleste. Lo suyo va por otro lado. ”No tendría por qué haber un tema de que se nacionalice o no. No veo el problema. Va a seguir jugando por Chile. Eso está más que claro”, concluye Ítalo Díaz sobre el futuro de su hijo Paulo.