Alfredo Arias lo pasa mal. Dice que ni siquiera sale a la calle y que, antes de eso, prefiere quedarse en su casa analizando los partidos y proyectando soluciones para la crisis de la U. Es que el momento que atraviesa el conjunto laico es complicado (también en lo económico) y la situación del entrenador al interior del club se torna compleja. Los universitarios marchan en el penúltimo lugar de la tabla, con los mismos nueve puntos que el colista Cobresal, en zona de descenso directo. Y el DT, no puede evitar los cuestionamientos tras nueve encuentros sin triunfos en la misma cantidad de duelos dirigidos.

"Si tuviera un gato en mi casa, lo patearía al ángulo cada vez que llego a la casa", dijo, intentando explicar la ofuscación que siente tras cada encuentro. "Soy tan hincha como los hinchas de mi equipo. Yo quiero que nos vaya bien. Por suerte no tengo una mascota... Y como no está mi familia tampoco, ne ha tocado enfrentar esto solo. Pero no se me ha visto caminando o paseando. Me encantaría haber paseado más, pero no quiero salir, prefiero quedarme viendo los partidos, analizando. No puedo estar contento con lo que estoy viviendo, pero sí tengo que estar fuerte", expresó, consultado por la manera en que está enfrentando internamente la crisis de la U. "Trato de dormir con mi opinión y vivir con mi consciencia. Nunca me he rendido ni lo haré ahora", anticipó.

Y aunque intenta dar señales de fortaleza, el charrúa sabe que el momento del equipo apremia. "Si fuera por los resultados, la evaluación es malísima. No hemos podido ganar. Hemos merecido ganar, todos los partidos excepto uno, pero no lo hemos conseguido. Pero yo no tengo que analizar eso. Eso lo tienen que hacer quienes están a cargo del club", enfatizó, poniéndose en manos de la directiva en la previa de un duelo que se anticipa como clave para su futuro, este domingo ante Iquique (12.30 en Calama).

"Si tuviera que analizar cómo está el grupo... ha mejorado. ¿Jugamos mejor o peor? ¿Cuántas chances nos creamos? ¿Cuántos pases damos? ¿Cuánto rematamos al arco? Esos datos son los que tengo que analizar yo. Si partimos del resultado, como hace el periodismo acá, la cuestión no resiste análisis", argumentó al mismo tiempo. "Pero a mí me toca la otra parte y lo último que tengo que analizar es el resultado. El análisis de si debo seguir o no le corresponde a otros. Y seguramente lo están haciendo", añadió.

"Cuando uno elige esta profesión, y no se dan los resultados, sabe que el plazo siempre es hasta el domingo siguiente", enfatizó igualmente, al tiempo que ensalzó las mejoras del equipo y las buenas sensaciones que quedaron después del clásico. Y al final reiteró: "No está en nosotros la decisión. La decisión es de otros. A falta de resultados, seguramente la evaluación llegará".