El campeón mundial y Panamericano, Arley Méndez, continúa confirmando su poderío en las pesas. Tal como se pronosticó desde el comienzo, el cubano nacionalizado chileno dominó con holgura en la categoría hasta 85 kilos, quedándose con el inapelable oro, con un total olímpico de 377 kilos.
Kevin Wormald, el otro chileno en la disputa, se quedó con el bronce con un total de 330. La plata fue para el venezolano Keydomar Vallenilla, quien dio también una muy buena competencia. Levantó 160 kilos en arranque y 200 kilos en envión, 360 en total olímpico.
En la competencia en el arranque, el primer movimiento de la halterofilia, consiguió un total de 165 kilos, el peso más alto durante la competencia. No fue tan sencillo. Se presentó en la tarima para su primer intento, en 166, pero falló acusando dolores en el codo. Luego, en el segunda opción, repitió el mismo peso que finalmente lo coronaró. Intentó 172, pero no pudo. Wormald fue el tercero mejor, con 146 kilos.
En el envión, la segunda especialidad, Méndez comenzó con 200 kilos. Los levantó sin problemas y subió a los 212. Falló en el segundo intento, pero en el tercero, aunque sufrió, estuvo certero para ratificar la presea dorada. Con la marca, además, se elevó como récord nacional, sudamericano y panamericano en este movimiento.
Kevin, en cambio, ya había alcanzado su bronce de muy buena forma, peleando kilo a kilo la medalla con el colombiano Gustavo Maldonado (327 de total olímpico, 145 y 182). Wormald no falló ningún intento, y terminó subiéndose al podio al levantar los 184 de envión, sumando así los 330 en total.
