El escándalo arbitral que se ha desarrollado en las últimas semanas sigue golpeando al fútbol nacional. Después de que se conociera el relato de Francisco Gilabert de que recibió presiones para cobrar un penal a favor de Huachipato en la liguilla de promoción del torneo pasado.
“Cobro el penal, entendiendo que podía no ser penal, porque me la jugué. Vi desde atrás que la tocaba en el tobillo y caché que me iba a llamar el VAR. Listo. Me llama el VAR, voy a ver, veo que no es penal. Voy a salir con tiro de esquina y me dicen ‘Francisco, por favor, momento; analiza la camiseta’. Y veo una camiseta y veo un jalón de camiseta”, señaló el árbitro.
“Digo que me parece que es una acción de juego, voy a ir con tiro de esquina. ‘Francisco, por favor analiza la camiseta’, me dicen. Y yo, ¿qué? Chucha, ahí entendí que algo había pasado. No sé qué chucha, pero algo raro. Y me fui con esa sensación de cobrar una hueá que no era. Termina el partido y el VAR me dice ‘hueón menos mal que cobraste el penal, menos mal que nos entendiste’. Puta sí, pero qué hueá pasó. ‘No, me llamaron de Santiago que tenía que cobrar penal”, complementó.
Debido a esto, la ANFP le comunicó a Javier Castrilli, ahora ex jefe de la comisión de los jueces chilenos, que quedaría suspendido mientras se realizaba la investigación. Ante esto, el argentino optó por renunciar al cargo.
Pero este hecho ha servido para que se insinúen otros hechos que pudieran ser cuestionados, tal como lo dejó reflejado el portero de Deportes Copiapó Richar Leyton. En una entrevista concedida a DirecTV Sports el futbolista puso en duda la salvación del descenso de Universidad de Chile tras dar vuelta un 0-2 en contra ante unión La Calera en los últimos minutos.
“Esto no es sólo la liguilla, en el partido final de primera división, queda la duda de cómo se convirtieron tres goles de manera tan rápida en el partido de U. de Chile y Unión La Calera”, expresó en la oportunidad.
En dicho partido, los azules evitaban cualquier complicación si conseguían vencer a los cementeros en el duelo que se desarrolló en Rancagua. Los universitarios estaban abajo por 0-2 hasta que Ramón Arias (84′ y 90+3′) y Junior Fernandes convirtiera el 3-2 definitivo que desató la eufórica celebración de los jugadores.