Quienes lo conocen aseguran que Junior Bórquez (20 años), nacido y criado en la popular población Nueva Victoria de Iquique, siempre ha tenido problemas con el sobrepeso; carga con él durante toda su corta carrera. Luchó contra los kilos de más cuando llegó a probarse a la sub 15 de Iquique como delantero; también cuando brilló en el Sudamericano Sub 17 de 2017, en el que fue escogido como el mejor arquero del torneo. Hasta hace unos días, luchaba por quedarse con el arco de los Dragones Celestes.
El aprendiz de Claudio Bravo y Manuel Neuer por Youtube destaca por su estatura, pero mucho más por el buen juego de pies que posee. Y ha sufrido tanto con esta quimera que incluso al final de la temporada pasada estuvo a punto de bajar del primer equipo celeste por estar tres kilos más gordo, fue ahí cuando fue al doctor y todo pareció mejorar. Pero no. A través de un cuestionario por email, el portero de La Roja Sub 20 accede a contar el calvario que vive tras marcar positivo por furosemida en un control antidopaje que lo podría dejar hasta dos años fuera de competencia. Su defensa ya está en marcha.
¿Se imagino esta situación?
Me han explicado que las sanciones son altas. Lo he visto en otros casos, pero no me quiero poner en esa situación, demostraré que no hubo intencionalidad de obtener alguna ventaja en el medicamento que tomé, que es un diurético con prescripción médica. Confío en que el Tribunal de (Expertos en) Dopaje considerará mi situación al momento de resolver, no solamente lo que ingerí sino por qué lo ingerí y como está en riesgo mi carrera y mi futuro laboral y también de las personas que dependen de mí. Compañeros de profesión me han hablado que el tribunal es severo, pero entienden cuando uno lleva los antecedentes.
¿Tomó el furosemida?
Como dije anteriormente, este medicamento lo tomé debido a un problema médico que tuve a finales del mes de diciembre. Se me recetó para que lo consumiera por un médico.
¿No sabía que lo estaba tomando?
Los adquirí e ingerí porque me lo prescribió el doctor a finales de diciembre. En esa oportunidad informé al doctor que era un jugador profesional de fútbol, pero no sabía sobre sus implicancias o que era una sustancia prohibida. La verdad no lo sabía.
¿No se informó sobre lo que puede y no tomar un deportista?
Sé que tenemos obligación de no ingerir nada por nuestra cuenta sino solo lo que nos receten los médicos, a quienes debemos informar en nuestra condición de deportistas. Todo debido a que podemos ser sometidos a pruebas sobre sustancias prohibidas, cosa que hice.
Luis Sotomayor, el otro arquero de Iquique, marcó la misma sustancia...
No me corresponde a mí responder esa pregunta.
¿Cómo ha sido enterarse de esta situación en cuarentena?
Me afectó mucho. Nunca imaginé que esto me podría ocurrir. Siempre he sido un deportista que he cumplido con todas las reglas. Me he cuidado mucho durante mi corta carrera y por lo mismo quedé muy afectado por mi futuro, por el club, por las personas que me han ayudado y han confiado siempre en mí.
¿Qué medidas tomó el club?
Me han apoyado totalmente desde el primer momento, llevo años en el club. Soy formado en casa y me conocen, por lo tanto saben que jamás haría nada para tratar de obtener una ventaja extradeportiva y creen en mi palabra. Ellos, desde el primer día han estado preocupados, me han contenido y asesorado. A través del club ya están los abogados tratando mi defensa.
¿Ya ha avanzado en su defensa?
Ellos han visto casos de otros deportistas, empezamos a trabajar desde la semana pasada. Principalmente, estamos reuniendo todos los antecedentes que nos permitan demostrar que no hubo intencionalidad de mi parte y que tomé este medicamento por un problema y recetado por un médico que tuve a fines del año pasado, pero que jamás se hizo para obtener alguna ventaja deportiva.