Claudia Silva (54) es uno de los refuerzos más importantes de Blanco y Negro en la aspiración de conseguir un nuevo Estadio Monumental de primer nivel. La arquitecta, con una larga trayectoria en la realización de la red de recintos Bicentenario, entre otras obras deportivas, se entusiasma con esta nueva empresa, que ilusiona a los hinchas del Cacique.

¿Cómo llegó a este proyecto?

Yo había trabajado con Harold cuando se hicieron los estadios de la fase 1 para el Mundial femenino de 2008; Coquimbo, La Florida, Chillán y Temuco, y ahí empezamos a trabajar en conjunto. Yo estaba como jefe de proyectos estadio del MOP y levantamos esa iniciativa, cuando nadie creía que íbamos a sacar los cuatro recintos. Después seguí trabajando en estadios mucho tiempo. Ya conocía este vínculo con Harold y él me invitó, propuso mi nombre al directorio y el directorio estuvo de acuerdo.

¿Lo pensó mucho?

La verdad que no, esto es una asesoría. Me ha tocado enfrentar desafíos grandes con temas de estadios acá en Chile, como el Ester Roa y otros. Y tratar de concretar estos sueños, me ilusiona muchísimo.

¿Es uno de los desafíos más grandes de su carrera?

Ojalá, porque estamos soñando en grande. Pero el Ester Roa también fue un desafío grande, todos tienen diferentes características. En el caso del Ester Roa, tenía que estar sí o sí para la Copa América, el plazo fue muy cortito. En cambio, en este, el desafío va a ser tener que construir mientras el estadio esté en uso y, evidentemente, elevar recursos. Pero en esta etapa, es la construcción en simultáneo con el estadio en uso.

¿Y cómo ve el levantamiento de recursos?

Lo que pasa ahora y que hace 100 años atrás no pasaba era que se colocaran nombres. Hacia allá vamos.

La idea es llegar al centenario.

Tenemos dos sueños: llegar al centenario en 2025 y ser sede del Mundial 2030.

¿Cuándo comenzarían las obras?

Sí o sí hay que empezar ya a trabajar en ello. Todo 2020 es para diseños y el apalancamiento de recursos y ya en 2021 hay que empezar a construir algo. Ahora, como se está planeando por etapas, efectivamente uno no tiene que tener todos los recursos altiro. Hay ejemplos, como Chinquihue, que se hizo en dos etapas.

¿Cuál será su función concreta?

Yo los voy a apoyar en este concurso de este plan maestro y queremos tratar de ordenar todo lo que es el recinto y tratar de construirlo de manera orgánica y no inorgánica. Se está soñando con instalar una arena y un lugar para las series menores. Yo les voy a ayudar a concretar este plan maestro.

¿Cuáles son las situaciones más complicadas que van a enfrentar?

Recursos, no nos engañemos. Y lo otro que va a ser muy complicado es la construcción. Porque cuando nos planteamos no parar el estadio, lo que es súper razonable, tendremos que tener sectores cerrados y esa parte va a haber que trabajarla con mucho detalle.

¿Cuánto dinero se necesita para concretar este proyecto?

Todavía no hemos decantado el número exacto, pero de acuerdo a mi experiencia con el Ester Roa, en el que se remodeló parte del estadio y no hubo que partir de cero, costó $ 950 mil por espectador. Nosotros pensamos que este debiera andar por los tres cuartos de eso, alrededor de unos $ 700 mil por espectador.

¿Ha sido fluido su trabajo en este mes y medio?

Yo llevo poco en este proceso, pero ha sido súper fluido. Hay un equipo de infraestructura que está trabajando, que es parte del directorio, y ha sido súper acogedor. Transmiten ideas, se cambia, se retrocede, se avanza...