Arturo Vidal tiene ahora el reconocimiento que siempre esperó cuando decidió irse al Barcelona. Paulatinamente se fue ganando la confianza del técnico Ernesto Valverde, la de las figuras del equipo español y, ciertamente, la de la hinchada. Y desde ese nuevo rol, el volante chileno aprovecha para ejercer un creciente liderazgo, que no pasa inadvertido para los conocedores de la realidad del club azulgrana.

El diario Sport, por ejemplo, destaca el apadrinamiento de Vidal sobre Ousmane Dembélé. El francés estuvo sancionado por indisciplina, al faltar a un entrenamiento por quedarse dormido después de una noche jugando PlayStation. Cumplida la sanción, el galo se reinserta. El chileno, consigna la publicación, le brindó permanente respaldo durante el partido ante los holandeses. "Tras esa imagen de tipo duro y ultracompetitivo sobre el terreno de juego hay un profesional que ha sido bien acogido en el vestuario por su capacidad de integración y sintonía.

Quizás esté ahí el motivo por el que Arturo Vidal parece uno de los más implicados en conseguir que Dembélé encuentre su lugar bajo el sol barcelonista. Tras la crisis y las críticas de la última semana, desde dentro del propio club han surgido voces pidiendo paciencia y comprensión para 'El Mosquito'. Y una de las más contundentes ha sido la del centrocampista chileno", destacan.

En la conferencia de prensa previa al duelo, Vidal ya había dado señales de contención hacia el galo. "A veces se habla mucho de lo que pasa fuera del campo y no dentro. Es joven y necesita cariño y consejos", había declarado, con Valverde como compañero de mesa.

El medio también destaca lo que sucedió en el campo. "Parece asumir un cierto punto de guía para Dembélé, con el que se vio hablar sobre el terreno de juego y en el túnel de vestuarios del Philips Stadion, corrigiéndole y apoyándole. Los dos se juegan mucho pues quieren consolidarse en el once inicial de un Barça en el que la titularidad está muy cara", detallan.