Arturo Vidal no tiene freno. Ni bien se entera de las críticas que le formuló Rodrigo Goldberg a propósito de sus apreciaciones relativas a la Selección, el Rey sale a contestar. Lo hace lanzando munición gruesa. Sin filtro. En el mismo estilo que viene utilizando en las últimas semanas. Primero, para referirse a River Plate y, ahora, para cuestionar las decisiones de Ricardo Gareca en la Roja.
“Es un tipo elegible, pero los liderazgos se definen por varias características y una de esas es que en los momentos difíciles tú tiendes a unir, no a desunir, que es lo que hace él. Tiene un espíritu mesiánico “y yo tengo que estar y yo jugué en los mejores clubes del mundo”...que él está por sobre de todo, él es prácticamente un dios, que cómo es posible que no esté. De verdad, es sicológicamente preocupante”, sostuvo Polaco en el marco de su rol de comentarista en la radio Cooperativa.
Dardo y respuesta
El exariete azul fue más allá. “En Chile está demasiado arraigado que el currículum y los títulos te permiten decir la sandez que se te ocurra. Puedes hacer lo que quieras, pero no importa porque gané esto. Un tipo que chocó ebrio una Ferrari y le dijo ‘te vai a cagar al país’ al carabinero. Y recuerdo miles de mensajes con ‘no importa, porque nos hizo ganar la Copa América’”, expone. “¿Porque ganó esto tiene derecho a decir, hacer lo que quiera y pasarse por buena parte a la autoridades chilenas, al DT de la selección chilena? Yo creo que no. Si hay alguien que cree que sí, fantástico”, sentencia.
A Vidal, la intervención no le gusto. A través de un live en Instagram en la cuenta de Carlos Palacios, en el camarín albo. “¿Cómo se llama el periodista? ¿Goldberg es periodista?”, cuestionó, con evidente sarcasmo. Luego, soltó la bomba. “Díganle al muerto que quiso ser presidente de la U y casi la descendió”, disparó.
“¡Y quiere hablar de mí!”, sentenció, acompañado de una risotada generalizada en la que se escucha a varios de sus compañeros en el vestuario albo participando de la sorna.