El 11 de febrero de 2024 fue, oficialmente, el retorno de Arturo Vidal al fútbol chileno. Estuvo a muy poco de sellarse con una nueva corona para su exitosa y extensa carrera, con un gol incluido, sin embargo todo se desmoronó por la suspensión de la Supercopa entre Huachipato y Colo Colo a raíz de los gravísimos incidentes acaecidos en el Estadio Nacional, producidos por la Garra Blanca.

Como uno de los protagonistas de la jornada en Ñuñoa, el exjugador del Flamengo analizó lo sucedido, poniendo el acento en insistir en jugar.

“Es lamentable, pero creo que la violencia no le puede ganar al fútbol. Era necesario terminar el partido, faltando 13 minutos. Da mucha rabia. Claramente estas cosas echan a perder el fútbol, hay que analizar bien qué pasó primero que nada. Pero esto no puede seguir ensuciando al fútbol. No pueden ser tan graves estas cosas en nuestro país, en otros lados hay cosas peores y siguen jugando. Eso molestó mucho, nos dejó muy tristes porque queríamos ser campeones, entrenamos harto tiempo, estábamos haciendo un gran partido y terminar así es muy feo. Ojalá que la ANFP se haga cargo. Nosotros queremos ser campeones en cancha”, declaró el futbolista.

Añadió que esto (la violencia en el fútbol) “pasa en todos lados”. “En otros lados hay otras medidas que acá no las aprenden. Acá se lavan las manos y quieren parar los partidos, seguir ensuciando al fútbol. Creo que hay que ser responsables en estas cosas, analizar bien qué paso. En el entretiempo nos contaron (qué habría sucedido) pero después, cuando se inició el segundo tiempo, tiene que terminar el partido”, continuó.

“En el de Argentina con Brasil (por las Eliminatorias, en Maracaná) se estaban matando y siguieron jugando; por qué acá en Chile son tan graves. El árbitro quería jugar, Huachipato quería jugar. Esto va a salir para todo el mundo. Todos estábamos tristes porque queríamos jugar”, añadió Vidal.

El análisis que hizo el seleccionado nacional se basó, fundamentalmente, en el deseo de que se juegue y así poder ganar el trofeo en el campo. “Impotencia, porque uno quiere ser campeón en cancha. Tenía tantas ganas de levantar una copa con Colo Colo y terminar así una Supercopa es muy feo. La decisión (de la suspensión) vino de arriba, se lavan las manos. No entiendo. El partido estaba bien”, manifestó en la zona mixta. “Hay que tratar de manejar mejor estas cosas... Si hubiésemos levantado la copa con ellos (los barristas), capaz que no hubiese pasado esto al final”, agregó.

Ahora será el directorio de la ANFP el que deba reunirse y determinar el devenir del choque entre acereros y albos.

Sigue en El Deportivo