A Universidad de Chile le saldrá caro el comportamiento de sus hinchas ante Unión La Calera. Como si los problemas futbolísticos no fueran suficientes, ahora la Intendencia de Santiago decidió reducir el aforo del sector sur del Nacional, donde se ubica el núcleo de la barra brava Los de Abajo, como castigo por el uso de pirotecnia y bengalas el domingo, en Ñuñoa.

"Vamos a evaluar de cuánto será la disminución de los alrededor de 15 mil espectadores que pueden estar ahí, pero eso ya está decidido. Estamos hablando de una barra reincidente, que hace poco ya estaba sancionada y que vuelve a generar desórdenes que ponen en riesgo la seguridad de todos", aseguró la titular metropolitana.

Los azules, que ya habían sido penalizados con dos partidos de visita sin público, por la conducta de sus aficionados en Concepción, ahora sufrirán una merma económica en la recaudación. El caso es que durante la semana, el grupo más radical de su barra se organizó a través de sus vía habituales de comunicación para protestar contra Azul Azul y Carabineros, con pirotecnia y bengalas, y con la intención expresa de suspender el partido. ¿Cómo pudieron ingresar con tanto material pirotécnico y encima avisándolo?

"En cuanto a la limitación del aforo, ahí hay un impacto económico muy relevante para el club. Hicimos lo mismo con Colo Colo en los sectores de Arica y Lautaro", agregó Rubilar. La autoridad regional señaló que la cifra exacta será determinada con Estadio Seguro.

Este departamento también condenó lo ocurrido y responsabilizó a Universidad de Chile por ser organizador del evento. El club estudiantil está citado para hoy a una reunión en la Intendencia.

El problema para la U no termina ahí, porque el árbitro Eduardo Gamboa dio a conocer los hechos en su informe, por lo que los universitarios se exponen a castigos severos como jugar a puertas cerradas. "En el minuto 59, la barra de Universidad de Chile ubicada en el codo sur lanza fuegos de artificios. Posteriormente al minuto 69 el partido debió ser detenido porque nuevamente la barra lanza en gran cantidad fuegos artificiales y encienden un gran número de bengalas. Las detenciones fueron alrededor de 3 minutos", detalla el informe.

La U emitió un comunicado donde lamentó los hechos, junto con instar a las autoridades y a la ANFP a solucionar el problema de la violencia en el fútbol. "Ante esta situación, instamos a abordar el tema de manera decisiva a partir de una mesa de trabajo multisectorial en la que tomen parte la Intendencia de Santiago, el Plan Estadio Seguro, Carabineros de Chile y la ANFP. La solución a esta problemática social debe abordarse de manera integral, ya que excede las competencias operativas de seguridad que pueda tener un club de fútbol", sostuvo el club.

En tanto, Los de Abajo justificaron su actuar en la gestión de Carlos Heller en su época de presidente y en que banderas de la barra, requisadas por Carabineros, en Antofagasta, aparecieron, según ellos, en poder de hinchas albos.

La U es un lío dentro y fuera de la cancha.