Corría el minuto 52 de partido y Arturo Vidal se convirtió en protagonista del partido que disputaban Athletico Paranaense y Cuiabá. El volante chileno estaba cumpliendo un correcto partido, cuando en ese momento fue a presionar la salida del cuadro visitante, lo que le permitió recuperar el balón cuando Raniele la tenía y despacharse un remate furibundo que dejó sin opción al arquero Walter. Era el 2-0 transitorio.
El volante festejó eufóricamente el tanto, mientras sus compañeros lo abrazaban. Sin embargo, el árbitro del partido Arthur Gomes Rabelo decidió acudir al VAR para ver la jugada del gol. Después de unos momentos de estudio de la jugada, optó por anular el tanto tras interpretar como intencional un rebote en un dedo de la mano del King. En síntesis, pensó que el volante acomodó el balón con esa extremidad para sacar el disparo.
La medida fue ampliamente protestada por todos los jugadores y la hinchada, pero el juez ya había tomado la decisión de anular la conquista y no había nada más que hacer.
Finalmente, el volante fue reemplazado en el minuto 67 por Bruno Zapelli, con la frustración de no haber podido convertir su primer tanto con la camiseta del Furacao, pero con la ovación del público. Había abierto la cuenta Agustín Canobbio, con un cabezazo a los 45′.
Después de la polémica acción, Paranense cayó en un estado de confusión que le duró hasta los últimos minutos. No obstante, el tanto de la tranquilidad llegó en el minuto 82, cuando Zapelli, precisamente el reemplazante del chileno, estiró las cifras con un remate bajo junto al palo izquierdo desde el centro del área, luego de una asistencia de Tomás Cuello.
Con la victoria, el equipo del Rey Arturo trepó hasta la sexta posición del Brasileirao, con 31 puntos, superando por cantidad de goles convertidos a Fluminense. De todos modos, la cima está muy lejos, pues Botafogo lidera escapado con 47 unidades, 13 más que su escolta Palmeiras.