Arsenal de Inglaterra, uno de los mejores equipos en la actualidad, respondió al rótulo. Los isleños golearon 3-0 al campeón Real Madrid en la ida de los cuartos de final de la Champions, resultado que suena hasta corto para lo que ocurrió en Londres.

Un compromiso en el que los británicos o rehuyeron al protagonismo. Es cierto que Vinicius Junior ya había insinuado un par de llegadas en el comienzo. Sin embargo, tras ese par de situaciones, fue el equipo de Mikel Arteta el que dominó las acciones, con y sin pelota.

Porque en el primer tercio del encuentro, el capitán se vio superado. La presión asfixiante de los Gunners impedía la salida prolija de los merengues, mientras que cada pelota al área provocaba reacciones en extremo para los hispanos.

A los 10 minutos, un tiro de esquina de los londinenses pudo hacer la diferencia. Pero, tras un par de rebotes, el zaguero local William Saliba terminó salvando la ocasión en vez de empujarla adentro.

Por más que tuviera la pelota y manejara los tiempos, el elenco isleño no encontraba ese pase final que pusiera a uno de sus hombres solo frente al arco de Thibaut Courtois.

Tras la media hora, el Madrid salió un poco del agobio. Jude Bellingham encontró más espacios para generar fútbol y encontrar a alguno de sus estelares delanteros. Así ocurrió a los 31’, cuando habilitó a Kylian Mbappé con un pase filtrado, pero el remate del galo fue al cuerpo del golero español David Raya.

Entonces, el enfrentamiento derrochó aproximaciones. Bukayo Saka, quien superó constantemente a David Alaba en la derecha del ataque de Arsenal desbordó un par de veces, pero sus peligrosos centros no encontraron recepción en la mitad de la cancha.

Al borde del descanso, la escuadra británica tuvo las opciones más claras de abrir la cuenta. Un centro perfecto de Thomas Partey permitió el cabezazo de Declan Rice que Courtois sacó de manera extraordinaria. El rebote quedó en los pies de Gabriel Martinelli, pero el belga volvió a salvar su arco.

En el tiempo complementario, los Gunners no cejaron en su afán de obtener la ventaja. Con mucho juego asociado y aprovechando las escasas licencias que daba el Madrid, el local se fue acercando al arco merengue.

Los ingleses encontraron la ventaja en una pelota detenida. Alaba derribó a Saka y dejó el tiro libre directo a 25 metros del arco. Declan Rice tomó el disparo, que tomó un efecto increíble para derrotar a Courtois por fuera de la barrera, mientras en España cuestionaban la conformación de la barrera por el golero belga.

Eran los mejores momentos de los británicos que estaban al borde de noquear al monarca. A los 67 minutos creó una triple acción de peligro, que no pudieron definir Martinelli y Mikel Merino, ante dos grandes reacciones del belga. En la jugada siguiente, el tiro de Rice fue repelido en la línea por Bellingham.

Y llegó el segundo, por la misma vía. Nueva falta al borde del área. Esta vez, el mismo Rice volvió a derrotar la resistencia del Madrid con un ajustado y potente tiro libre que se coló en un ángulo. Uno más del talentoso volante que llegó a Arsenal desde West Ham United, en julio de 2023, previo pago de 130 millones de dólares.

El campeón no reaccionó y el local quedó a tiro de la tercera conquista. A los 75 minutos, Myles Lewis-Skelly habilitó a Merino en el borde del área y el remate del navarro se metió en un rincón para el 3-0.

Suficiente y hasta mezquino para lo que ocurrió en el Emirates. Lo cierto es que los británicos se van con una ventaja importante para la vuelta del martes, en el Bernabeú.

Inter golpea

En Múnich, Inter de Milán dio la gran sorpresa en la ida de cuartos de final tras vencer por 2-1 al Bayern en el duelo de ida. Fueron los bávaros quienes dominaron a primera media hora de juego. A los 7 minutos, un remate de Michael Olise fue el primer aviso del dominio de los germanos.

Más tarde, a los 20’, fue el golero Yann Sommer quien evitó la conquista de Raphaël Guerreiro. Instantes más tarde, Harry Kane quedó solo frente al meta suizo, pero su ajustado disparo dio en un poste.

Pero el equipo del técnico Simone Inzaghi esperó su momento. A los 38’, un centro raso de Alessandro Bastoni permitió el toque de Marcus Thuram y el remate inmenso de Lautaro Martínez para el 1-0.

El mismo argentino tuvo el segundo en el tiempo complementario, pero falló en la definición, mientras se fueron diluyendo ante la resistencia italiana.

Thomas Müller logró el empate, a los 85’. Pero Davide Frattesi devolvió la ventaja a los lombardos, a dos del final. El duelo de vuelta se jugará el jueves, en el Giuseppe Meazza.

En la jornada del miércoles, Barcelona recibe a Borussia Dortmund y Paris Saint-Germain espera a Aston Villa, ambos duelos a las 15:00 horas de Chile.