Balonmano: a Chile no le alcanza con el buen arranque ante España y termina cayendo en su debut en el Mundial

Chile no pudo en su debut en el Mundial de balonmano. La selección cayó por 31-22 ante España. Si bien los dirigidos por Aitor Etxaburu tuvieron un gran comienzo de partido, y llegaron a estar tres puntos arriba, el elenco europeo marcó la diferencia en el aspecto físico y se vio más entero en los momentos claves del compromiso. Ahora el combinado nacional se debe medir ante Suecia.

El partido inició a las 14 horas nacionales y fue intenso. A los cinco minutos el marcador ya decía 2-2, con anotaciones de Esteban Salinas y Erwin Feuchtmann para el equipo sudamericano. Luego fue de golpe y golpe. Chile llegó a estar tres puntos encima. Sin embargo, cuatro errores en los últimos 10 minutos marcaron la diferencia y al descanso se fue España en ventaja por 17-13.

En el segundo tiempo, la diferencia se amplió. El cuadro nacional tuvo nueve conquistas más y los ibéricos 14. Pese a la derrota, en la antesala se preveía como un encuentro complejo. “Será un partido difícil, muy complicado también de analizar. Son jugadores muy completos. Aunque también vienen ahora con un cambio de generación. Tienen muchos jugadores jóvenes y nuevos que vienen con muchas ganas también. Como análisis de partido vamos a tener que estar contundentes, sobre todo en defensa, en los repliegues. Son muy rápidos en el contraataque y al final nuestro error nos condena demasiado”, había dicho Luciano Scaramelli, jugador chileno, a El Deportivo.

El balonmanero también trazó las metas del equipo. “El objetivo es claro, pasar de ronda, competir todos los partidos y mejorar como grupo. Son pocas las instancias que tenemos nosotros como selección y cada una la tenemos que aprovechar al máximo. Tenemos que competir todos los partidos y sobre todo en el partido contra Japón, que sería nuestro partido clave para pasar de grupo”, señalaba.

Una situación que también fue abordada por el entrenador. “Queremos pasar el main round, este es un deporte muy europeo, la diferencia con los otros continentes es muy amplia. Intentamos mejorar poco a poco, sería histórico pasar esa fase de grupos. Si no, nos gustaría, al igual que el Mundial del 2023, llegar a la final de la President’s Cup”, anticipaba Etxaburu.

Ahí, al igual que Scaramelli, reconocía el poderío de los europeos. “España y Suecia son poderosos físicamente, tenemos que intentar aislarlos. Si vamos a la batalla, será difícil encontrar espacio. En ataque, hay que aislar a sus jugadores, circular el balón y encontrar nuestras oportunidades. Tenemos que adecuarnos al ritmo frenético del balonmano moderno, con transiciones altísimas. Es una debilidad que hemos intentado trabajar, el armario de fondo no es el mismo que tienen ellos. No tenemos que entrar en ese ritmo frenético”, decía.