El Barcelona tuvo que librar una dura batalla para imponerse 0-2 al Girona, en duelo válido por la 21ª fecha de la liga española. El elenco catalán disputó un primer tiempo irregular y mejoró en el complemento, aunque nunca lució como el cuadro sólido y dominante de otras jornadas.

Nelson Semedo abrió la cuenta a poco andar (9'), aprovechando un rebote tras un intento de pase de Arturo Vidal en plena área. La apertura de la cuenta, sin embargo, no amilanó a los dueños de casa que, pese a la desventaja, exhibieron buenos argumentos para hacerle frente a los de Ernesto Valverde, que contaron con un inspirado Marc-  André ter Stegen.

El Rey fue titular y estuvo en el campo de juego hasta los 58', cuando el entrenador decidió sacarlo de la cancha para propiciar el ingreso de Arthur. Hasta ahí, el nacido en San Joaquín había dejado su ya clásica huella de empuje y carácter, aunque estuvo poco participativo en faena ofensiva. La inclusión del brasileño en su lugar, en tanto, le permitió a los catalanes controlar mejor la pelota y acercarse con más claridad sobre el arco rival. A esa altura, los forasteros jugaban con un jugador más tras la expulsión del colombiano Bernardo Espinosa (51'), por doble amonestación. Con un globito sutil, Lionel Messi marcó el segundo para los suyos (68') y sentenció el compromiso.

Con este resultado, los azulgranas alcanzan 49 puntos y se mantienen como exclusivos líderes de la primera división española, cinco por delante del Atlético Madrid. En la próxima jornada liguera (sábado 2 de febrero, 14.30 de Chile), recibirán al Valencia en el Camp Nou. Antes, eso sí, el miércoles (17.30 de Chile), deberán hacer frente a la revancha de los cuartos de final de la Copa del Rey, donde lucharán para revertir el 2-0 sufrido en la ida, ante el Sevilla en Andalucía.