Había aroma a partidazo y lo fue. El primer capítulo de la serie de semifinales entre el Barcelona y el Liverpool lo ganaron los españoles por 3-0, premio a la eficacia en el área rival y a un trabajo colectivo de alto nivel. La final está cerca.
Un duelo tan parejo, con equipos de tanta riqueza en la cancha, se establecía como una partida de ajedrez. Para sorpresa de varios, Ernesto Valverde decidió poner de titular a Arturo Vidal en vez de Arthur. Así, el Rey fue estelar por segunda vez en esta edición de la Champions, en la cuarta semifinal que tiene el seleccionado nacional. Con la presencia de Vidal, el Barça ganó en despliegue, para contrarrestar a un Liverpool que no se escondió en el Camp Nou. Como se trataba de un ajedrez, Jürgen Klopp se la jugó con dejar en la banca a Firmino y poner al holandés Wijnaldum de falso 9, para acompañar a Mané y Salah. Estos dos hicieron daño en el área rival cuando tuvieron espacio, pero no concretaron.
La visita se desplegó en la cancha, incomodando a un Barcelona que no entró en sintonía desde el pitazo inicial, salvo Messi. La velocidad de Salah hacía daño por la franja de Jordi Alba. Cuando eran los Reds los que se asentaban mejor en el campo, llegó la estocada de Luis Suárez. En los 26', el Barça abre la cuenta. Todo nace con un preciso pelotazo largo de Vidal a Coutinho. La jugada prosigue con la proyección de Alba, quien envía un centro rasante para que el uruguayo arremeta, entre Matip y Van Dijk, para batir a Alisson. El 9 lo celebró con todo. Le dio lo mismo que se tratara de su exclub. Fue el primer tanto de Suárez en esta Champions.
El Barcelona mutaba del 4-4-2 al 4-3-3. En ese sentido, Vidal pasaba de ser interior derecho a volante por la derecha. En el otro lado, Coutinho era puntero izquierdo en ataque y volante cuando Liverpool tenía la pelota. El cotejo iba de arco a arco, con intensidad y refriega, como una semifinal de Champions entre dos clubes del primer mundo. Espectáculo al por mayor.
Aunque el marcador haya reflejado ventaja para los azulgrana, el encuentro transitó por un trámite parejo. Entre los 46' y los 60', el Liverpool se creó chances claras para anotar pero la figura de Ter Stegen creció para mantener su arco en cero. Valverde tomó cuenta de esto y metió a Semedo por Coutinho, con lo cual Vidal se cambió a la izquierda (salió favorecido el chileno, porque su segundo tiempo fue notable). La modificación ordenó más al Barcelona. En los 75', el local encuentra el 2-0 con Messi, quien tomó un rebote tras un tiro de Suárez al travesaño. El 2-0 dejó mal al Liverpool, pero el golpe de gracia vino en los 82'.
Un extraordinario tiro libre de Lionel Messi supera la estirada de Alisson para un 3-0 que encamina al Barcelona a la final de Madrid. El partido generó tantas emociones que bien pudo terminar 3-1 o 4-0, pero lo concreto es que el equipo de Vidal da un paso grande para meterse en la final de la Champions. La vuelta, que será el martes 7, promete ser tan buena como la ida.
Ficha del partido
Barcelona (3): Ter Stegen; Sergi Roberto (90'+3', Aleñá), Piqué, Lenglet, Jordi Alba; Vidal, Busquets, Rakitic, Coutinho (60', Semedo); Messi, Suárez (90'+3', Dembélé). DT: E. Valverde.
Liverpool (0): Alisson; Gomez, Matip, Van Dijk, Robertson; Milner (84', Origi), Fabinho, Keita (24', Henderson); Salah, Wijnaldum (79', Firmino), Mané. DT: J. Klopp.
Goles: 1-0, 26', Suárez, arremete entre Matip y Van Dijk y conecta pase rasante de Jordi Alba; 2-0, 75', Messi, captura rebote del balón en el travesaño y anota libre; 3-0, 82', Messi, con un brutal tiro libre.
Árbitro: B. Kuipers (HOL). Amonestó a Lenglet, Suárez, Jordi Alba (B); Fabinho (L).
Camp Nou, Barcelona. Asistieron 98.299 personas.