Bayer Leverkusen, flamante campeón de la Bundesliga alemana y Atalanta de Italia protagonizarán una final inédita en la historia de las copas europeas. En Dublín, República de Irlanda, ambos equipos definirán el título de la Europa League, a las 15:00 horas de Chile.
Los germanos son un equipo que ya conoce estas instancias. En 1988 supo levantar la Copa de la UEFA, la precuela de la actual competición. Además, cayeron en la final de la Champions League 2002 ante Real Madrid, con el recordado golazo de volea de Zinedine Zidane.
Por el lado de los peninsulares, esta es la primera vez que llegan al último encuentro de una competencia continental. Su mejor registro fue la semifinal de la desaparecida Recopa en la edición de 1988, cuando cayeron ante el Mechelen de Bélgica que a la larga sería el campeón.
Ambos equipos llegan en el mejor momento de su respectiva historia. El elenco teutón suma 51 partidos sin conocer la derrota en toda la temporada: 34 de la Bundesliga, 12 de la Europa League y 5 de la Copa de Alemania; torneo en el que disputará la final ante el Kaiserslautern de la segunda categoría.
Los bergamascos también protagonizan un momento exclusivo en su bitácora. Con un fútbol directo y sin complejos, el equipo de la Lombardía suma tres terceros puestos en la Serie A de Italia en las últimas seis temporadas (en la actual está quinto con dos partidos menos) y entre el ‘20 y el ‘22 disputó sus tres primeras versiones de Champions League.
Ambos equipos se midieron en este mismo torneo, en los octavos de final de la temporada 2021-’22. Los bergamascos ganaron 3-2 como locales y vencieron por la mínima en la vuelta, para eliminar al equipo donde jugaba el chileno Charles Aránguiz.
Millonario premio
Más allá de conseguir la segunda corona más importante a nivel de clubes, levantar el trofeo significa una gran retribución monetaria para los clubes. La más alta en la historia de la competición.
Solo por acceder a este partido final en tierras irlandesas, cada uno de los equipos sumó cerca de 7,5 millones de dólares a lo ya ganado anteriormente. Además, el cuadro que se imponga en ese enfrentamiento sumará cerca de 8,6 millones más de la divisa norteamericana y el perdedor alrededor de 5,4.
Cada instancia representa un importante incentivo de parte de la UEFA. A saber, US$ 4 millones por avanzar a la fase de grupos, una cifra similar por los seis partidos de esa etapa.
Además, ambas escuadras lograron 1,2 millones de la divisa norteamericana por terminar primeros en sus respectivas zonas. Los octavos de final permitieron ingresar US$ 1,9 millones, los cuartos cerca de 2,7 millones y las semifinales más de 4.5.
Es decir, solo por incentivos de la organización, el nuevo campeón sumará alrededor de 30 millones de la divisa norteamericana, solo un poco menos del monarca de la Copa Libertadores que en 2024 acumulará poco más de 31 millones.
Así también, la confederación europea entrega otros 3,5 millones por concepto de market pool, es decir, un nuevo reparto a cada país solo por competir en este tipo de torneos.
Alemanes, favoritos
Las casas de apuestas ya tienen sus pronósticos para la gran final de irlanda. Factores en los que el equipo técnico sensación del momento, el español Xabi Alonso, asoma como el principal candidato.
Si los germanos se llevan su segunda corona en el torneo después de 36 años, cada apostador multiplicará por 1,5 cada dólar comprometido. La mitad de lo que premia el primer puesto de los lombardos que tienen un factor de 3.0 por cada divisa comprometida.
En cuanto al costo de los planteles, la plantilla del club del gigante químico tiene un valor de 645 millones de dólares, mientras que el de los italianos no llega siquiera al 60% de esa cifra con US$ 380 millones, sumados los pases de todos sus futbolistas.