El Bayern Múnich después de Vidal: vientos de cambio en tiempo de definiciones

Recién en la última fecha, el Bayern Múnich pudo proclamarse campeón de la Bundesliga, quebrando la tendencia de los años anteriores, en los cuales el panorama estaba claro con antelación. Este sábado, goleó al Eintracht Frankfurt para retener la corona.

El cuadro muniqués tuvo una férrea disputa con el Borussia Dortmund, justo en una temporada "de transición", con muchos cambios en el club, con uno que afectó directamente a Chile: la salida de Arturo Vidal. ¿Cómo marcha la vida del gigante bávaro mientras el Rey ya está cada vez más acomodado en Barcelona?

En su minuto, la sobrepoblación de volantes le abrió la puerta de salida al seleccionado nacional, quien no fue prioridad para el croata Niko Kovac, el reemplazante de Jupp Heynckes en la banca. "Estaba predestinado a tomar las riendas del Bayern", dijo el longevo DT acerca de su sustituto, a quien le ha costado en su primera temporada. De hecho, estas dos semanas resultan claves para su proyecto y, eventualmente, su continuidad en el cargo porque se juega la opción de ganar dos campeonatos: la liga y la Copa de Alemania. Ya ganó uno.

Fue un golpe bajo quedar afuera de la Champions en octavos de final, a manos del Liverpool.

"Ha sido un cambio de estilo muy brusco. De entrenadores de posesión han pasado a un DT que en su club anterior defendía. Es un choque de mentalidades que ha sido duro, pero se están encontrando, por lo menos a nivel nacional. Vidal fue muy querido en el Bayern, por la afición, por sus compañeros, pero no es el factor del cambio. El impacto del fichaje del entrenador determina el porvenir", opina Javier Cáceres, periodista chileno del periódico germano Süddeustsche Zeitung.

La campaña fue de muchos vaivenes. El Dortmund llegó a estar ocho puntos y 24 goles por sobre el Bayern. Pudieron enmendar el camino y terminaron dos puntos sobre los amarillos, para obtener el heptacampeonato. Además, el DT ha tenido que salir al paso de temas extradeportivos, como la pelea que tuvieron en un entrenamiento Robert Lewandowski y Kingsley Coman, durante abril.

Uno de los protagonistas de la temporada ha sido James Rodríguez, pero no por sus actuaciones descollantes, sino más bien por diferencias con Kovac. Pronto debe decidirse el futuro del colombiano, porque la cesión del Real Madrid se termina en junio y se debe definir si el Bayern ejercerá la opción de compra de 42 millones de euros. Encontrones que ha tenido tanto con su entrenador como con el director deportivo, el exfutboista Hasan Salihamidzic, han alterado su panorama, según constató la prensa alemana.

Si de futuro se trata, el Bayern Múnich tiene un objetivo trascendental: rejuvenecer su plantel. Para eso, pondrán mucho dinero sobre la mesa. "El próximo verano tendrá lugar la mayor inversión en fichajes de la historia del Bayern", adelantó el presidente Uli Hoeness. Para aquello, ya ataron a los dos laterales campeones del mundo: Benjamin Pavard y Lucas Hernández. Por el zurdo del Atlético de Madrid gastarán 80 millones de euros, que lo transforma en el defensa más caro de la historia y en el fichaje más costoso del gigante bávaro en sus 119 años.

El propio Hoeness anunció que disponen de 200 millones de euros para fichajes, de los cuales 115 ya están en las compras de Pavard y Lucas. Esta es una estrategia que no se condice con el tradicional accionar de los clubes alemanes, uno que pone la responsabilidad financiera por sobre todo, alejándose de las cifras abultadas de clubes con avales extranjeros.

Al cabo de la temporada, tres históricos del club se marchan: el holandés Arjen Robben (35), el francés Franck Ribéry (36) y el brasileño Rafinha (33). La nueva era del Bayern Múnich ya está en construcción.