Beñat San José evita apropiarse excesivamente del título de Universidad Católica. Le endosa el mérito casi exclusivamente a sus jugadores. "Estoy muy feliz. Inmensamente. Fue una temproada larga. Estuvimos todo el año en la punta, menos una fecha. Hemos jugado con grandes equipos. Este trofeo es de los jugadores", insiste.
Y luego extiende su gratitud al resto del club. "Quiero agradecer a Tati, a la directiva, que me escogió", añadió.
Luego intentó resumir la campaña. "Mucho esfuerzo, gran staff, con un gran club y un equipo ha estado a la altura. Hemos demostrado que hemos sido el equipo más regular, porque levantamos el trofeo. Hay que celebrar, pero con respeto, porque estamos en Temuco, que no lo está pasando bien".
También tuvo palabras para su cuerpo técnico. "El profe Lloveras es un fenómeno. Y todo mi staff también. Todos. Sería injusto no mencionar a alguno. Todos han participado, hemos hecho debutar jóvenes, que hoy son activos para el club y el fútbol chileno", evaluó.
En ese contexto, habló de la cohesión con los jugadores. "Yo me adapté al equipo. Mi deber era sacar lo mejor de cada uno. Lo primero que tenía que hacer era adaptarme y darles una idea", recordó.
Y se refirió, con mesura, al próximo ejercicio: potenciar el plantel. "El mercado está abierto. Habrá que ver qué movimiento habrá, seguramente el club estará muy atento. Habrá que hacer un muy buen trabajo de scouting", sentenció.
