Huachipato hizo historia en Porto Alegre. O, en rigor, la actualizó. Los acereros volvieron a imponerse a Gremio en su casa. Ya lo habían hecho en 2013, también por la Copa Libertadores. En esta victoria, el equipo de Javier Sanguinetti hizo gala de oficio y eficiencia. Incluso puede jactarse de haber construido el triunfo con goles de altísima factura.
Buena parte del mérito reside, también, en la solidez defensiva que el campeón chileno exhibió en Brasil. Sus zagueros fueron capaces de imponerse en una brega compleja, al punto de provocar la impotencia de los anfitriones ante la imposibilidad de vulnerar el arco que defendió Martín Parra. La prensa local, por ejemplo, fustiga esa inoperancia.
Misión compleja
Una de las misiones más complejas la tuvo Benjamín Gazzolo. Le correspondió la marcación de Diego Costa, el estandarte del ataque gaúcho. Con 35 años, el ariete está en la recta final de una carrera que en su punto más alto lo llevó a brillar en el Atlético de Madrid y el Chelsea y que lo transformó en seleccionado español.
Diego Costa es un jugador duro. Gazzolo lo sufrió. Sin embargo, el defensor surgido en Unión San Felipe pudo controlarlo. Luego del partido, de hecho, lució una imagen que grafica el enfrentamiento en su cuenta en Instagram. Naturalmente, se llenó de elogios. “Me gusta jugar con delanteros de nivel. Me motiva mucho más y me hace prepararme de mejor forma. Para mí era un gran desafío enfrentarlo a él y creo que me vi bien. Gané la mayoría de los duelos y no pudo hacer mucho”, valoró.
Un triunfo histórico
El recuerdo, dice, le durará por un buen tiempo. “Ha sido uno de los partidos más importantes que he jugado, en un estadio maravilloso. Estoy muy contento por el resultado”, sentenció a la radio ADN.
“Teníamos una convicción enorme de que podíamos sacar un buen resultado acá”, complementó respecto de los tres puntos que los siderúrgicos cosecharon en su paso por el Arena do Gremio y de la actitud con que el plantel acerero se había tomado el compromiso, más allá de los evidentes pergaminos del rival.
La valoración es enorme. Sobre todo porque coincide con una hazaña anterior del club en el mismo escenario. Gazzolo, de hecho, no la obvió en la síntesis. “Es algo histórico que volvimos a repetir después de muchos años. Creo que hicimos un partido más que correcto, un partido copero y estamos muy felices”, resumió, en alusión a la gesta que, esa vez, se construyó con goles de Federico Falcone y Braian Rodríguez.