Marcelo Bielsa no ve la luz en Inglaterra. Con su gente en Elland Road, el Leeds salió a la cancha con la urgencia de sumar de a tres. A pesar de la necesidad de victoria, el equipo del DT argentino no pudo doblegar al Wolverhampton y solo logró rescatar un empate a 1, hacia el final del encuentro por medio de un penal que convirtió Rodrigo Moreno.

Leeds salió a buscarlo desde un inicio. Con la vuelta de una de sus grandes figuras, Raphina, Bielsa sabía de la necesidad de ganar. A pesar de que el equipo local empezó mejor, en la primera llegada de profundidad de la visita, el surcoreano Hwang Hee-Chan anotó la apertura de la cuenta en el minuto 10. Con un sutil remate de derecha desde el centro del área, los Wolves marcaron el primero. Meslier, a su suerte, nada pudo hacer.

Un gol que devino de variados errores de la defensa loca, que nunca pudo posicionarse bien para marcar. Tras el gol, el visitante empezó a sentirse más cómodo en el partido y Bielsa, de cuclillas, miraba absorto el partido, como queriendo encontrar una rápida respuesta.

Hacia la media hora del partido Leeds mejoró. Adelantando sus líneas, presionando más ordenado y recuperando el balón de forma más rápida, el equipo del Loco empezó a mejorar. Raphina era el más activo de los de Bielsa. Por derecha, el centro o desde la mitad de la cancha, el brasileño trataba de generar fútbol y contagiar a sus compañeros. Sin embargo, el conjunto del Loco no lograba profundizar. Los Wolves, cómodos, no pasaban mayores zozobras y, bien posicionados, no sintieron peligrar la portería defendida por José Sá. Así, se fueron al descanso, con un Bielsa preocupado mirando el piso, pensando en posibles soluciones.

En el complemento, el Leeds tenía que ir a buscar, al menos, el empate. Por eso, Bielsa introdujo el primer cambio, dando entrada a Tyler Roberts por Jack Harrison. Sin embargo, a los 50′ el Loco tuvo una mala noticia. Tras una entrada de Romain Saïss, el jugador más determinante del Leeds, Raphina, tuvo que salir lesionado por problemas en su tobillo derecho. Bielsa no entendía y, de cuclillas, posición habitual del argentino, observaba el campo haciendo diversas muecas que hacían notar su preocupación.

Por eso, a los 63′ el DT argentino mandó el tercer cambio al terreno de juego: Joe Gelhardt por Mateusz Klich, esperando con esto una reacción. Con los cambios, Leeds se vio mejor, aunque la ausencia del brasileño se notaba, especialmente por la profundidad por el sector derecho del ataque. En tanto, los Wolves manejaban el cotejo, esperando los espacios para salir rápido con Rayan Aït Nouri, Adama Traoré y Raúl Jiménez.

Ya cuando el reloj marcaba el 75′, Leeds empezó a apurarse. Presionando más y con recuperaciones altas, los de Bielsa comenzaron a hacerse con el partido. Y justamente en esa presión alta vino lo que fue la mejor ocasión del local. A los 79′ el joven Gelhardt remató con un potente remate desde la izquierda del centro del área, que obligó a una estirada milagrosa de José Sá, cancerbero visitante.

A los 90+4′ llegó el ansiado empate de Moreno, quien convirtió por medio del lanzamiento penal tras una falta que hizo Semedo. Punto de oro que, en este contexto, vale mucho para un Leeds que sigue muy preocupado en la zona baja de la tabla. Con este resultado, los de Bielsa siguen en el 17° lugar de la tabla, con siete puntos y a solo dos unidades del descenso directo.

El próximo desafío para el equipo del Loco, en Premier, será ante el colistsa y recién ascendido Norwich, de visita. Partido vital para que los dirigidos de Bielsa puedan, por fin, despegar.