En una extensa reunión de directorio, la mesa de Blanco y Negro acordó revertir la decisión de enviar a la mutualidad al defensa Matías Zaldivia, quien se rompió el tendón de Aquiles derecho el 19 de septiembre pasado. La determinación implicaba que la ACHS o la isapre se hicieran cargo del sueldo del jugador, quedando con un tope de un poco más de dos millones de pesos, muy lejos de los $ 18 millones que percibe de salario el argentino.
Públicamente, el Club Social y Deportivo Colo Colo levantó la voz para rechazar la medida, a lo que también se sumó el bloque vialista, opositor a la testera que encabeza Aníbal Mosa. Así, el timonel y su sector quedaron solos en esta idea que, en su momento, fue defendida por el gerente general Alejandro Paul, argumentando que la decisión se tomó tras la denuncia del Sifup por el caso de Iván Morales, por el cual los albos fueron multados por no informar a la ACHS la situación del delantero. Esto detonó en el anuncio del sindicato, aprobado por el propio jugador, de presentar las acciones correspondientes ante los organismos laborales.
Después de acaloradas discusiones, se acordó que el club pague la diferencia que no cubre la isapre o el organismo administrador y así respetar el compromiso existente en el contrato del transandino. Para ello fueron mandatados Paul y el gerente deportivo Marcelo Espina. La medida corre para esta situación y también para futuras situaciones similares.
El acuerdo busca tranquilizar los ánimos con el plantel e intentar recomponer en algo la fracturada relación entre los jugadores y la dirigencia. Incluso, el entrenador Gustavo Quinteros se había ofrecido para actuar como mediador frente a este duro conflicto.