Botafogo cae en Uruguay, pero se mete por primera vez en la final de la Copa Libertadores

La Copa Libertadores 2024 tiene a sus finalistas. Y como viene siendo una costumbre, el título se definirá entre brasileños. Esta noche, en Montevideo, Botafogo cerró su serie ante Peñarol con una derrota 3-1, pero de igual manera acabó sellando su clasificación hacia el duelo por la corona (porque goleó en la ida), para enfrentar al Atlético Mineiro.

Esta eliminatoria quedó prácticamente sentenciada en la ida, jugada hace una semana en Río de Janeiro. Con un segundo tiempo de alto vuelo, el Fogao arrolló a los carboneros con un rotundo 5-0, partido en el cual destacó el seleccionado brasileño Luiz Henrique. Salvo una hecatombe en Uruguay, el elenco que comanda el portugués Artur Jorge iba a estar en la final. Por lo mismo, el DT hizo algunos cambios.

El duelo tuvo un intempestivo cambio de estadio. Estaba programado originalmente para el Campeón del Siglo, el reducto del Manya. Sin embargo, fue trasladado al Centenario para que hubiese hinchada visitante. En un primer momento, se había impedido la presencia de torcedores brasileños a raíz de los serios incidentes acaecidos en Río de Janeiro con hinchas uruguayos.

El cuadro aurinegro terminó ganando el partido de vuelta, pero fue insuficiente para aspirar al milagro. De todas formas, se retiró levantando la mirada y dejando un mejor sabor de boca, luego de la mala experiencia en el Nilton Santos, hace siete días.

En los 31 minutos, Jaime Báez abrió la cuenta con un golazo. Un notable remate desde fuera del área se clavó en un ángulo del golero Jhon. Si el panorama estaba cuesta arriba por el marcador, se complicó más para Peñarol por la expulsión del arquero Washington Aguerre, al filo del entretiempo.

En el complemento, repitió Báez. En los 66′, el anotador repitió, con otro disparo de distancia. Con uno menos, los pupilos de Diego Aguirre seguían en la pelea. Y Botafogo también se quedaría con uno menos, por la expulsión de Mateo Ponte. Uno que no fue titular y entró en el segundo lapso fue el argentino Thiago Almada. En los 88′, el campeón del mundo descontó, para cerrar de una vez la eliminatoria. En la acción siguiente, Facundo Batista hizo el 3-1 para el Manya, que sería el resultado definitivo.

Con un marcador global de 6-3, Botafogo clasificó por primera vez en su historia a una final de Copa Libertadores. Es el único del G-12 (los 12 equipos grandes de Brasil) que nunca ha ganado el trofeo. El año pasado lo consiguió de manera inédita Fluminense, ante Boca Juniors en el Maracaná.

El Fogao enfrentará al Atlético Mineiro de Eduardo Vargas por el título y la clasificación al Mundial de Clubes 2025 (es el último cupo). Será el sábado 30 de noviembre, en Buenos Aires.