A veces se olvida que hay vida más allá de Verstappen y Hamilton. Que no solo ellos dos pueden reinar cada fin de semana del calendario. Por eso lo hecho por Bottas se agradece. Pese a que una pole a fin de cuentas no vale mucho, lo de hoy es un mensaje. Para los fanáticos, para los pilotos y para Mercedes. El finlandés saldrá primero y su compañero segundo. Algo que en Red Bull lamentan.
Los errores cuestan caro. Eso aprendió Red Bull hoy. En una Q3 donde ya dominaban sus rivales, se la jugaron porque Checo siguiera a Tsunoda y Verstappen al mexicano. Una fórmula que podría haber funcionado si es que el japones no se hubiese salido de pista. El desajuste del piloto de Alpha Tauri fue replicado por Pérez, quien no pudo reaccionar y termino fuera del camino. Una sucesión de errores que terminó afectándole al 33, quien tuvo que frenar de sobresalto.
Bottas por su parte estuvo impecable. Fue superior y puede tener la seguridad que pese a que el error de sus rivales ayudó, su ritmo era difícil de superar. A tal punto de que ni Hamilton pudo alcanzarle. Un sábado perfecto para Mercedes, uno que necesitaban desde hace tiempo.
En la Q2 quedaron fuera Vettel, Raikkonen, Russell, Ocon y Giovanizzi. Este último sufrió un accidente en la curva 12 que afectó al español Carlos Sainz, quien pese a los problemas logró salir airoso de este intento frustrado de vuelta rápida.
Pero si hay algo que llamó la atención durante la jornada, eso sin fue el accidente de Stroll. El choque del piloto de Aston Martin contra una de las protecciones cuando tomaba la recta, provocó las banderas rojas sobre la capital mexicana. Un traspié que obligará al canadiense a comenzar último el Gran Premio. Algo que afecta pero no de sobremanera, ya que estaba dentro de la lista de conductores sancionados por cambios a la unidad de potencia ¿Los otros que comenzarán desde el fondo? Norris, Tsunoda y Ocon.
Algo que Haas ni siquiera pudo aprovechar. Sus pilotos también quedaron rápidamente fuera e incluso se dieron el gusto de tener una pelea con los ingenieros. Mundo de locos.