BRASIL 2 - ARGENTINA 0
Brasil: Alisson; Dani Alves, Marquinhos (63', Miranda), T. Silva, Alex Sandro; Arthur, Casemiro; G. Jesús (80', Allan), Coutinho, Everton (46', Willian); R. Firmino. DT: Tite.
Argentina: F. Armani; J. Foyth, G. Pezzella, N. Otamendi, N. Tagliafico (85', P. Dybala); R. De Paul (68', G. Lo Celso), L. Paredes, M. Acuña (59', A. Di María); L. Messi; L. Martínez, S. Agüero. DT: L. Scaloni.
Goles: 1-0, 19', Gabriel Jesús, define dentro del área tras pase por bajo de Firmino; 2-0, 71', Firmino, en área chica luego de un carrerón de Gabriel Jesús.
Árbitro: R. Zambrano (ECU). Amonestó a Dani Alves y Allan (B); Tagliafico, Acuña, Foyth, Martínez, Agüero y el DT Scaloni (A).
Estadio Mineirao, Belo Horizonte. Asistieron 52.235 personas.
Brasil está en su final. Derrotó a la Argentina de Messi por 2-0 y abrochó su clasificación al partido del domingo, donde buscará su noveno título de Copa América, frente a Chile o Perú. El gran favorito de todos está donde las apuestas los ponían desde mucho antes del inicio del campeonato.
Talento para regalar tiene Brasil. En todos los puestos. De la nada nace la inspiración de un lateral derecho como Dani Alves, que se manda un sobrerito y un enganche para dejar a dos en el camino, que la abre mirando hacia otro lado y que genera así la jugada que termina con 1-0 anotado por Gabriel Jesús, a los 19'.
No era un partido fácil para la Albiceleste, que recién se venía sacando la presión de un comienzo agobiante de los locales. El gol del atacante del Manchester City, sin embargo, no la tumbó. Todo lo contrario, con una cuota importante de amor propio y competitivad, Argentina jugó, quizás, sus mejores pasajes de la Copa América.
Brasil se vio sorprendido. Siempre peligroso, obviamente, pero permeable. Ese buen momento coincidió también con el despertar de Leo Messi. El 10, jugando como enganche, pidió la pelota constantemente, generó faltas y espacios con gambetas y toques de primera. El Kun Agüero estrelló un cabezazo en el travesaño (centro de Messi), en lo que pudo ser el empate. Justo a esa altura.
Esa igualdad no llegó y en el complemento, el dominio de los transandinos creció. Messi, muy metido en el juego, estrelló un disparo en el poste. Antes, Lautaro Martínez había exigido a Alisson, el mejor portero de la Copa América, y De Paul (otro de los puntos albos de su equipo) elevó un tiro frontal. La verdeamarilla se veía encerrada, apremiada como nunca se había visto en su campeonato.
Pero Brasil tiene talento para regalar, ya está dicho. El de Gabriel Jesús, quien con el pecho se sacó a uno y con potencia esquivó a tres más cederle el 2-0 a Firmino (71'). Demasiado castigo para los argentinos, es verdad, pero el Scratch hace pagar con goles cualquier descuido. Y las estrellas del país vecino se descuidaron una o dos veces y fue suficiente para que el dueño de casa firmara su paso a la final.
Brasil está donde debe estar. Y ni siquiera es lo mínimo que se le exige al combinado de Tite. Es el título o nada para ellos, es lo que buscarán este domingo, ante Chile o Perú. Ojalá que el rival vista de rojo.