Salió veloz. Pasó los primeros cinco kilómetros en aproximadamente 15 minutos. "Si es capaz de no morir en el intento, si no desfallece después de una salida tan rápida, esta mujer va a batir mi récord", comentaba la ahora explusmarquista de el Maratón, Paula Radcliffe. Y así fue. Brigid Kosgei (25 años) pudo regular el ritmo y cruzó la meta de Chicago en 2.14'04", un nuevo récord mundial.

Corrió en solitario, solo acompañada de sus liebres, pasada la mitad de la carrera. La hazaña estuvo dura, incluso Kosgei demostró signos de fatiga que ponían en duda su aguante. Recién cuando le restaban 20 segundos para cruzar la meta, ya sin liebres, que la abandonaron cerca del kilómetro 39, Brigid sonreía tímidamente, dimensionando lo que estaba próxima a conquistar. "Estoy bien y feliz. No esperaba correr así . Solo quería correr mi mejor carrera", expresó la plusmarquista en un escuálido inglés. La segunda llegó siete minutos después.

El récord de la británica Radcliffe es de más de un minuto sobre la marca conseguida ayer por la keniata en Chicago y fue establecido hace 16 años. Fue uno de los récords más antiguos dentro de la disciplina callejera. Sorpresiva duración, porque calzó con la incorporación total de las mujeres en el deporte, además de la explosión en la participación de las africanas en la disciplina de los 42k. Dado que la carrera fue llevada a cabo en ambiente competitivo y a pesar de llevar las VaporFly, la marca fue instantáneamente homologada por la IAAF.

Además de llevarse el récord, este triunfo es el tercer Major para la keniata en un año. Junto con ser bicampeona de la carrera estadounidense, se coronó en abril como la más joven en adjudicarse el maratón de Londres.

Kosgei encontró en el atletismo su salvación. A los 18 años fue expulsada de su centro de estudios porque sus padres no podían financiarlo. Fue ahí cuando decidió dedicarse completamente al atletismo, en conjunto con su marido, el también atleta, Mathew Kosgei.

En la competencia masculina el resultado estuvo más ajustado y fue para el compatriota de Kosgei, Lawrence Cherono (31), quien completó el circuito en 2.5'45", diez minutos antes que Brigid. El segundo, el etíope Dejene Debela, llegó a un segundo de diferencia. El campeón defensor de la prueba, Mo Farah, se tuvo que conformar con el octavo puesto.